Elecciones Generales 2016

Rajoy dará más ayudas y días de excedencia por hijo

Presenta en Barcelona un texto con 26 propuestas centradas en la rebaja de impuestos y en ampliar las excedencias para cuidar de los hijos

El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, saluda a una vecina de Burgos en su último vídeo electoral
El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, saluda a una vecina de Burgos en su último vídeo electorallarazon

Presenta en Barcelona un texto con 26 propuestas centradas en la rebaja de impuestos y en ampliar las excedencias para cuidar de los hijos

El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ha presentadode nuevo en Barcelona su programa electoral para las elecciones de junio. Barcelona como punto clave en la disputa por el voto en esta campaña, con la defensa de la soberanía nacional como argumento implícito y explícito, y, además, con una apuesta decidida por ampliar los guiños a la clase media y a las familias.

En la dirección popular han estado dando vueltas al programa de diciembre para ver la fórmula que les permita encontrar un enganche para volver a presentarlo en sociedad, actualizarlo, sin desmentirse ni corregirse a ellos mismos. Esta campaña plantea a los partidos un serio problema para salir de lo previsible dentro del mismo discurso, con los mismos candidatos y los mismos programas. En clave programática, Génova ha apostado por hacer un guiño al 26-J con un documento con las 26 principales propuestas con «más incidencia» en la calle, en los ciudadanos. Bastantes estaban ya en el anterior programa, y la novedad consiste en que se concretan más o se cuantifican económicamente.

En este paquete prima la economía, la fiscalidad (con la promesa de rebajar en dos puntos el IRPF en todos los tramos), la conciliación, la mejora de la calidad educativa o la mejora de los servicios sociales. Como ya hizo en diciembre, Rajoy va a seguir dedicando buena parte de su campaña a insistir en la comparación entre la España que encontró y la que hay hoy, la España de la recesión y «la España que crea empleo, que genera confianza, con una banca saneada, con la recuperación del crédito». Pero uno de los déficits de esa recuperación económica es que todavía no ha servido para corregir la desigualdad social agravada con la crisis. Éste, y la corrupción, eran los dos grandes argumentos de la anterior campaña del «todos contra Rajoy». Los cuatro meses de negociaciones postelectorales y la pugna por el voto dentro del bloque de la izquierda y del centro-derecha han cambiado el relato, pero aun así en el PP son conscientes de que siguen teniendo pendiente el reto de acercar la recuperación a los ciudadanos. Para mejorar sus resultados de diciembre el PP necesita mover parte de ese voto menos ideologizado que en diciembre se les fue a Ciudadanos o sacar a parte de su electorado de la abstención.

Hoy Rajoy centrará el tiro en la economía dentro de su estrategia de no salirse de su «libro» y que sean otros los que se bajen a la arena a batirse a los puños con sus principales adversarios. Un ejemplo de las medidas en las que quiere colocar el acento el PP es su apuesta por seguir mejorando la situación de las familias numerosas con más incentivos fiscales, como recoge el documento de 26 propuestas para el 26-J, o con la decisión de otorgar la categoría de familia numerosa especial cuando se tienen 4 hijos o ampliar a todas las familias numerosas el periodo de excedencia para el cuidado de ellos. La revisión del programa incluye, asimismo, el compromiso de cambiar el uso horario o una defensa de que la jornada laboral concluya a las seis de la tarde.

El líder del PP tampoco va a polemizar con el ex presidente del Gobierno José María Aznar, ni en el terreno político ni en lo que afecta a que haga insinuaciones que dan lugar a interpretar que cuestiona su decisión de mantener el liderazgo del partido y seguir siendo el candidato a la Presidencia. Ayer la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, precisó que no van a hacer interpretaciones de interpretaciones sobre las declaraciones de la víspera de Aznar, en las que advirtió de que España lleva demasiado tiempo yendo por el mal camino y que para salir de esta crisis quizás hagan falta «sacrificios personales» para mantener el régimen constitucional de 1978. La decisión estratégica de Génova y de Moncloa es no echar más leña al fuego y no alimentar la polémica con el cruce de declaraciones. En la medida de lo posible, «ignorar» a Aznar.

En lo que sí fue más expresiva Soraya Sáenz de Santamaría fue en ratificar el compromiso de Rajoy con la rebaja de impuestos, dentro de su convicción de que España mantendrá el crecimiento y Bruselas nos concederá un año más de prórroga para el ajuste presupuestario.

La vicepresidenta del Gobierno en funciones también incidió en resaltar que la bajada del paro es el fruto de la «política seria del PP».

Una reforma laboral mejor que la de Linde

Rajoy aseguró ayer que sus propuestas para mejorar el mercado laboral e incentivar la contratación indefinida son mejores y más entendibles que las que planteó ayer el gobernador del Banco de España, Luis Linde. «Creo que es mejor la mía», dijo el presidente del Gobierno en funciones.

- Bajar el IRPF dos puntos

El PP propone una rebaja de dos puntos en el IRPF con un nuevo tipo máximo del 43%, frente al 45% actual, y un mínimo del 17%, en lugar del 19% existente a día de hoy.

- Familias numerosas

En el ámbito social y para ayudar a las familias, Rajoy otorgará la categoría de «familia numerosa especial» a aquellas que tengan cuatro o más hijos a cargo.

- Excedencias

También en el ámbito familiar, los populares proponen en su programa electoral ampliar el periodo de excedencia de los padres para cuidar a los hijos.