Rajoy: «Hoy se habla de cuán grande será la recuperación»

El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha asegurado hoy en Tokio que, tras las reformas económicas que han permitido dejar atrás "la percepción sombría"que había en su economía, España se ha convertido en el lugar idóneo para las inversiones extranjeras y, en particular, para las japonesas.

Rajoy ha defendido los beneficios que tiene España para la inversión en su intervención en la inauguración del Encuentro Empresarial Japón-España que se ha celebrado coincidiendo con su visita oficial a la capital nipona.

La primera actividad de la agenda del jefe del Ejecutivo español ha sido una reunión con los representantes de las principales empresas de Japón y en la que, según han informado a Efe fuentes españolas, Rajoy ha enumerado gran parte de los argumentos expuestos minutos después en el encuentro empresarial.

En este evento, el presidente de Gobierno ha destacado la mejoría de la economía española en el último año porque a finales del verano pasado se hablaba de cuándo iba a ser rescatada y, ahora, "eso ya es historia".

"Hoy se habla de cuán grande va a ser la recuperación de la economía española", ha añadido antes de resaltar que las "decididas reformas abordadas, el esfuerzo del pueblo español y algunos incipientes resultados, permiten ser hoy algo más optimistas que hace unos meses".

A su juicio, todo ello confirma que la opción elegida por su Gobierno era la correcta.

"La inversión directa extranjera está volviendo a España, ya que en el primer semestre del año ha aumentado un 11,3 por ciento respecto al pasado año", ha recordado Rajoy.

Pero, según ha explicado, es el sector exterior el que mejor refleja las ganancias de competitividad y los menores costes laborales unitarios, ya que en 2012 las exportaciones españolas alcanzaron un total de 222.643 millones de euros, una cifra que supone el mejor dato de una serie histórica que comienza en 1971.

Además en el primer semestre de este año han crecido un 7 por ciento.

Rajoy ha señalado que pese a la intensificación de las relaciones comerciales entre Japón y Españas (en los dos últimos años superan los 5.000 millones de euros anuales), esa cifra no guarda proporción con el tamaño de las dos economías, ya que Japón es la tercera de todo el mundo y España la decimotercera.

Ha recordado que las exportaciones españolas a Japón crecieron casi un 12 por ciento en 2012 respecto al año anterior hasta alcanzar los 2.075 millones de euros, y que aunque la crisis en España ha afectado a sus importaciones, las procedentes del país asiático han seguido siendo muy importantes.

Además, ha avanzado que se incrementarán cuando se culminen las negociaciones para la firma de un tratado de libre comercio entre la UE y Japón que España apoya totalmente.

Ha explicado que 40 empresas españolas están instaladas en Japón, mientras que 145 niponas operan en España generando más de 26.000 empleos y situando a Japón en el decimosexto mayor inversor en España en términos acumulados.

Además, ha informado de que en los primeros seis meses de este año, la inversión japonesa en España se ha incrementado casi un 37 por ciento, lo que, a su juicio, se trata de un buen barómetro de la salud de la economía española.

Para él, el número de empresas japonesas en España va a seguir aumentando en los próximos años no sólo por las ventajas competitivas que ofrece, sino porque está inmersa en un proceso de reformas que están convirtiendo al país en un "destino idóneo"para los inversores internacionales.

Ha explicado que las inversiones en España tienen una puerta abierta a negocios en la UE, el Mediterráneo, el norte de África y América Latina.

"España es la localización idónea para las empresas japonesas desde la que comercializar productos y servicios con estas áreas geográficas", ha añadido.

También ha señalado que España ofrece una dotación de capital humano de las más elevadas del mundo, ya que ocupa el cuarto puesto en Europa de personas con formación universitaria superior en ciencia o tecnología, y que la reforma laboral facilita la inversión extranjera.

Ha citado igualmente las buenas infraestructuras con que cuenta España como otra ventaja para las inversiones.