Operación Lezo

Rajoy pide al PP calma y que espere a que pase la tormenta

El presidente ha abordado con Génova desde Montevideo la crisis tras los últimos escándalos. Pide a los suyos reforzar el mensaje de máxima colaboración con la Justicia.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a su llegada el martes a Uruguay, junto al viceministro de Relaciones Exteriores del país, José Luis Cancela
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a su llegada el martes a Uruguay, junto al viceministro de Relaciones Exteriores del país, José Luis Cancelalarazon

El presidente ha abordado con Génova desde Montevideo la crisis tras los últimos escándalos. Pide a los suyos reforzar el mensaje de máxima colaboración con la Justicia.

El vendaval por la Operación Lezo ha pillado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de gira por Latinoamérica, en un viaje a Brasil y Uruguay. Rajoy ha estado en contacto telefónico con el partido y con miembros de su Gobierno para hablar de este asunto, y el mensaje que les ha trasladado sobre el nuevo caso de corrupción que les ha estallado se puede resumir en su tradicional apuesta por aguantar hasta que pase la tormenta. Tranquilidad y esperar, el lema con el que siempre ha gestionado situaciones difíciles como las que atraviesa estos días su formación por el escándalo que están provocando las filtraciones que acompañan a la detención de Ignacio González, «mano derecha» de Esperanza Aguirre.

Rajoy pide calma a los suyos con el argumento de que es una situación coyuntural, que pasará, igual que han escampado otras tormentas. El presidente cree que toca aguantar y no poner nerviosos ni improvisar discursos que pueden ser superados por nuevas circunstancias, según fuentes de Moncloa, y que justo en lo que hay que poner el acento es en la disposición a colaborar con la Justicia y con la investigación en todos los planos.

Un mensaje que choca con el ruido sobre las presuntas injerencias en la Fiscalía o por parte de otros ámbitos del Gobierno para presuntamente entorpecer la investigación sobre el entramado de la Operación Lezo. El Gobierno las niega, y justo es ahí donde la cúpula popular cree que debe colocar el tiro a la espera de ver si hay más novedades que perjudiquen a su marca. El ruido sobre esos movimientos en la Fiscalía o en Interior o en Justicia son cuestionados de puertas adentro. «No es el momento».

Mientras, la dirección popular sigue sosteniendo el discurso de que la Operación Lezo es un problema «del PP de Madrid», aunque preocupe al partido y afecte a las siglas en su conjunto. Es un «problema» que aunque sea responsabilidad del PP de la etapa de Esperanza Aguirre asumen que les sigue desgastando. Pero ante el que se sienten «desarmados» porque «son comportamientos individuales para el enriquecimiento personal». Esta mañana el Grupo Popular secundará la decisión en la Mesa del Congreso de constituir ya la comisión de investigación sobre su financiación. Una comisión que frente a las previsiones iniciales, que apuntaban que tardaría meses en ponerse en marcha, estará activa antes incluso de que se celebren las primarias del PSOE. Coincidiendo con el momento en el que lleguen a término los trabajos de la comisión de investigación impulsada también por la oposición contra el ex ministro de Interior Jorge Fernández.

El PP se opuso en su momento a formalizar con Ciudadanos (Cs) en el Registro del Congreso la petición de esta comisión. Pero ahora la estrategia la dirigen a sostener el mensaje de que están dispuestos a colaborar plenamente con sus trabajos, siempre y cuando no sean «un circo sin más objetivo que el desgaste del presidente del Gobierno».

Ayer Rajoy habló por primera vez en público sobre la Operación Lezo, que se ha llevado por delante a Aguirre. Aseguró que seguirá facilitando la labor de la Justicia y que es ahora, con el Ejecutivo del PP, cuando los jueces están actuando y condenando a los responsables de la corrupción, informa Efe. «Haré, como estoy haciendo, todo lo posible para facilitar su labor. Nadie podrá decir que bajo los Gobiernos del PP la Justicia no ha actuado con total y absoluta independencia», sentenció.

El jefe del Ejecutivo hizo estas consideraciones en la conferencia de prensa que ofreció en Montevideo junto al presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, al ser preguntado por la situación que vive España con las investigaciones judiciales en torno a diversos casos de corrupción. Rajoy dijo que confía plenamente en la Justicia porque cree en el Estado de derecho y en la separación de poderes y, por ello, insistió en que seguirá haciendo todo lo posible por facilitar su labor. «Pido que se deje trabajar con tranquilidad a la Justicia. Y desde luego, tengo muy claro que el que la hace la paga».