Rubalcaba impone su hoja de ruta

El Comité Federal del PSOE ha aprobado hoy con sólo dos abstenciones el calendario y reglamento de las primarias abiertas para elegir al candidato a la Presidencia del Gobierno y que se celebrarán a finales de noviembre.

Un día parece que se ahoga y al siguiente flota; hoy le dan por muerto y mañana resurge como el ave Fénix de sus propias cenizas. Alfredo Pérez Rubalcaba, el hombre al que la leyenda atribuye la paternidad de un comando que lleva su nombre y al que todo el mundo reconoce una inmensa habilidad para la maniobra política, vuelve a salirse con la suya. Dicho en versión políticamente correcta: logra imponer su hoja de ruta. Paso a paso y a su manera, el secretario general del PSOE va ganando batallas internas -que no la guerra- a sus críticos. El resultado del Comité Federal de ayer sábado fue otra prueba de ello. No sólo zanjó el debate sobre la fecha de las primarias (autonómicas en septiembre y nacionales en noviembre) sino que logró que los barones se enfrascaran en una intensa disputa sobre si la consulta para elegir cartel electoral en las distintas federaciones debía ser o no abierta a los ciudadanos.

Y es que, claro, esto de pedir democracia interna y apertura está muy bien cuando se demanda para el contrario, pero no cuando le toca a uno. El ejemplo más palmario: Tomás Gómez, el secretario general de Madrid que más ha «piado» para que las primarias nacionales fueran lo más abiertas posibles, va y dice esta semana que en su federación serán cerradas porque su liderazgo está consolidado. Más allá de la elocuente argumentación del líder del PSM, es cierto que hay federaciones pequeñas donde abrir el proceso de primarias a los simpatizantes tiene un riesgo evidente de que alguien ajeno al partido pueda voltear el resultado en favor de un candidato con algún interés exógeno al del PSOE. Y si algo quedó ayer claro en las más de siete horas de discusión del Comité Federal es que los barones no tienen una posición homogénea al respecto. Extremadura quiere primarias abiertas; Madrid, depende del día y para quién; Andalucía y Castilla-La Mancha, cerradas... Así que el Comité Federal, siguiendo la recomendación de la Conferencia Política, decidió como criterio general que en las primarias de las Comunidades Autonómicas participe sólo la militancia y que si alguna federación desea abrirlas, solicite la anuencia de la Ejecutiva Federal. Valencia, que ya tiene concedida la excepción fuera del calendario general para elegir candidato el 10 de marzo, será la primera experiencia de consulta abierta. Y, sin duda, será un precedente molesto para quienes las prefieren cerradas. Ya adelantamos ayer que Rubalcaba se había garantizado el apoyo casi unánime a su calendario a cambio de que que las primarias regionales fueran a la carta, esto es a criterio de los barones, tanto en el formato como en la fecha porque habrá, quienes además de Valencia, no las celebren el próximo septiembre (de momento, se sabe que las de Castilla-La Mancha serán después de las nacionales de noviembre).

Hasta aquí duró la intensa discusión sobre las primarias que, en contra de todo pronóstico, no fue no sobre el calendario ni sobre la modalidad de las nacionales, que es lo que más ocupado en los últimos meses a los socialistas. Nadie cuestionó que el cartel electoral para las generales no se conozca hasta finales de noviembre ni «el orden cronológico natural» de los procesos electorales que hay en el horizonte y que Rubalcaba invocó antes de desplegar su propuesta. Todos estuvieron de acuerdo en que las primarias abiertas serán una «decisión trascendental» que cambiará la política en España y que «habrá un antes y un después» de ellas (Rubalcaba, dixit).

Y todos entendieron la consigna de la dirección federal de que ahora, hasta noviembre, no hay nada más importante que las elecciones europeas como apuntó Rubalcaba con clara intención de frenar un precipitado baile de aspirantes que desvíe la atención sobre la primera convocatoria electoral del horizonte político. La idea fue remachada también por Susana Díaz, la todopoderosa «lideresa» de Andalucía, y también por el barón asturiano Javier Fernández, los dos únicos con poder institucional de todos lo secretarios generales. La primera llamó al esfuerzo y la unidad del todo el PSOE para que las europeas inauguren una «ola de cambio» y que cada uno se ocupe «cada uno se ocupe de lo que tiene entre manos». También dijo que las primarias «no son la panacéa» y que serán positivas sólo «si sirven para unir yno van contra nadie». Sus palabras se leyeron en clave de apoyo a Rubalcaba. Y lo mismo ocurrió con la intervención de Javier Fernández, que fue si cabe más claro en la llamada a contener el baile de candidatos: «Céntremonos en las europeas y también en dar respuesta al debate territorial sobre España o en los problemas laborales. Hay que evitar que el proceso de primarias se convierta en un pase de modelos o un "casting"hasta noviembre. No es tiempo de hablar de candidatos, de si es hombre o mujer, ni de quién tiene sonrisa cautivadora, más glamour o telegenia».

Sólo Carme Chacón, que antes nunca había pedido la palabra en un Comité Federal, se quejó del Reglamento de primarias, que no de la fecha. Sólo fue seguida en la crítica por José María Barreda -afín a la eterna aspirante- y por José Antonio Barrio de Penagos. Pese a todo, la ex ministra votó a favor del texto , no así los otros dos dicrepantes, que se abstuvieron.

La intervención de Chacón arrastró a Rubalcaba a una segunda intervención -ésta ya en cerrado para los periodistas- más enérgica que la primera para decir ante la plana mayor del PSOE que es él el más interesado en que las primarias abiertas «salgan bien» y que «cuanta más gente participe, mejor». Se refería, sin duda, a la posició de quienes como Chacón defienden que la exixtencia de un censo previo coartará la participación. «Soy el más interesado en que sean un éxito. Creo en ello y por eso quiero un proceso modélico. Las primarias son una apuesta estratégica de esta dirección», replicó. ¿Es o no un maestro de la prestidigitación? Le acusaron de no querer primarias y las habrá; de evitar ponerles fecha y ya la hay... Pero, atentos, porque el resultado de las europeas puede convertir todo lo ayer aprobado en revisable en un sentido u otro. Se verá.

Las claves del reglamento

- Elección de candidato Se realizará de una sola vez. Habrá que estar inscrito en un censo de electores ser mayor de 16 años y nacionalidad española.

- Mesas electorales No podrán tener un censo electoral superior a los 1.000 electores.

- Calendario de inscripciónSerá establecido en la convocatoria del proceso. Quien se inscriba deberá firmar una declaración de principios progresitas.

- Avales para candidato al GobiernoEl mínimo necesario será de 5% y no más del 10% de afiliados del PSOE y PSC.

- Elección a presidente autonómico El mínimo de avales será el 10% del censo de militantes directos de la Federación correspondiente y no más del 20%.

- Plazo de recogida de avales. Dentro un mínimo de 15 días y máximo de 20 que se establecerá en la convocatoria.

- Campaña de primarias Para la elección del candidato a presidente del Gobierno tendrá una duración mínima de 15 días y para autonómicos entre 7 y 15.

- Votación Se realizará en una sola jornada con duración mínima de 8 horas continuadas.

El calendario orgánico

9 de MARZO

El PSPV será la primera federación del PSOE que expermite con unas primarias abiertas

SEPTIEMBRE

El resto de federaciones socialistas elegirán a su candidato en septiembre, salvo que soliciten otra fecha.

NOVIEMBRE

Acabará para entonces el proceso de elección de candidato a las generales, que comenzará en octubre.

2015

Castilla-La Mancha celebrará sus primarias después de las nacionales, en el primer trimestre de 2015.