El colapso de la legislatura

Sánchez lanza un órdago hasta 2027: o él o una "oposición destructiva"

El presidente del Gobierno ignora en el Congreso los casos de corrupción que afectan al PSOE y entra en campaña contra Andalucía y Madrid

MADRID, 12/11/2025.- El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante su comparecencia este miércoles en el Congreso para informar de las últimas cumbres internacionales. EFE/ JJ Guillen
Comparecencia de Pedro SánchezJ.J. GuillénAgencia EFE

Pedro Sánchez lanza un órdago. El presidente del Gobierno, que está compareciendo este miércoles en el Congreso, ha reiterado una vez más que se mantendrá al frente del Ejecutivo hasta 2027, cuando vence la legislatura. El líder socialista está entrando en campaña contra las comunidades del PP, como Madrid y Andalucía. Y está ignorando los casos de corrupción que afectan a su partido, así como los escándalos que salpican a su entorno.

Para el presidente la dicotomía está clara. O él o una "oposición destructiva abonada al esperpento". Poco importa que Sánchez esté acorralado, sin apoyos parlamentarios. Él está pisando el acelerador. Por eso, ha optado por el ataque como defensa. Ha cargado con dureza contra la oposición, a la que ha acusado de practicar una “estrategia rendida a la ultraderecha”, y ha reivindicado, sin titubeos, que “no ha habido en la historia del país un Gobierno tan parlamentario como el que presido”.

El jefe del Ejecutivo ha aprovechado su intervención para lanzar un dardo también a Junts, después de que el partido haya decidido bloquear toda la acción del Gobierno en la Cámara. Les ha instado a “reconsiderar su decisión” en nombre del “interés general” y de “la gente”, como ha subrayado.

Sánchez ha presentado a la derecha como una fuerza política agotada. A su juicio, España asiste al “colapso político e intelectual” del PP y de Vox, que —ha afirmado— “carecen de proyecto” frente a la gestión socialista, la misma que, según él, ha hecho que “España funcione”.

El presidente ha aprovechado además la tragedia de la DANA en Valencia para golpear al popular Carlos Mazón por su “nefasta gestión”, y ha advertido de que vigilará de cerca la alianza entre PP y Vox en la Comunidad Valenciana.

Con gesto firme, Sánchez ha prometido resistir “hasta 2027, pese a todo”, y ha cerrado su intervención reivindicando su política de “tolerancia cero” con la corrupción. Un mensaje calculado para dejar claro que, aunque el barro le salpique, no piensa moverse del sitio.

Sánchez solo se ha referido a la corrupción para decir que, en España, “adopta muchas formas” y ha incluido entre ellas a “los partidos que recortan para beneficiar a algunos”. Puede que, ha concedido, “eso no sea corrupción en términos jurídicos”, pero sí lo es “en términos morales”, porque —ha sentenciado— “se nota en las aulas, en la sanidad y en el Estado del bienestar, que es el alma de España”.

A partir de ahí, el presidente ha tirado de cifras para apuntalar su argumento. Ha presumido de haber transferido más de 300.000 millones de euros a las comunidades autónomas durante su mandato, una cantidad que ha comparado con la que destinó el Ejecutivo de Mariano Rajoy. El mensaje, nítido: frente a los recortes de la derecha, el socialismo, según Sánchez, garantiza la prosperidad colectiva.