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«Se nos reduce el sueldo de nuestra vida»

Andrés Sardón empezó en la Academia en 1981. Ha visto a muchos compañeros morir y «recogerles a cachitos» en los años duros de ETA. Ahora hace números para llegar a fin de mes. Sólo pide que se reconozca su trabajo

Miguel Gómez, miembro de JUSAPOL, junto al agente prejubilado Andrés Sardón, ayer en Palencia
Miguel Gómez, miembro de JUSAPOL, junto al agente prejubilado Andrés Sardón, ayer en Palencialarazon

Andrés Sardón empezó en la Academia en 1981. Ha visto a muchos compañeros morir y «recogerles a cachitos» en los años duros de ETA. Ahora hace números para llegar a fin de mes. Sólo pide que se reconozca su trabajo.

En su familia no hay antecedentes de pertenencia al Cuerpo de la Policía Nacional. De pequeño jugaba a policías y ladrones y dice que él siempre quiso ir con los buenos. «Es una profesión que siempre me gustó aunque podría haberme metido a trabajar en la fábrica de armas de Palencia, porque había estudiado maestría industrial, ganando más, pero esta profesión me gustaba», asegura Andrés Sardón, policía nacional que en la actualidad está en la 2ª actividad, es decir, prejubilado.

Empezó en la academia especial de la Policía Nacional en 1981 en Santander, y de ahí pasó a los «viejos antidisturbios» de la 11 compañía de reserva general hasta que en 1993 le destinaron a Palencia, donde estuvo en la brigada de seguridad ciudadana en radio patrullas, los coches del 091. «He visto morir a compañeros, he tenido que recogerles a cachitos en aquellos años, como antidisturbio. También patrullé las calles de San Sebastián en los años duros de ETA. Tuvimos un atentado en Miranda de Ebro en el festival de cine donde murió un compañero de nuestra propia unidad». «Es algo que siempre se tiene muy presente en el recuerdo».

En la actualidad, con 58 años, ya ha pasado a la 2ª actividad, sin destino –lo que tiene un pequeño complemento más que la de un jubilado– . Destaca que un policía jubilado cobra en la actualidad un sueldo de 1.355 euros es decir; casi 1.000 euros menos que la pensión de un Mosso, que puede alcanzar un sueldo que rondaría los 2.000 euros como poco. Y es que la Policía Nacional cotiza por un sueldo base, 720 euros más trienio, y el resto por complementos que tributan, pero no cotizan. –Un guardia civil cobraría como jubilación en torno a los 1.200 euros–. «A nosotros se nos descuentan todos los derechos, se nos reduce el sueldo de nuestra vida, como si no hubiéramos estado trabajando», destaca Sardón. En total, un policía nacional ve reducido su sueldo unos 400 euros del que tenía cuando estaba en activo. «Aunque esté en segunda actividad cobro como un jubilado. Hay compañeros más antiguos que yo que todavía cobran menos. Yo tengo los trienios aún por eso. «Los trienios se han subido ahora un poco, pero oscila entre 30-40 euros al trienio, que no es mucho dinero, incluso creo que no llega a 30 euros porque nos descuentan lo de Hacienda».

¿Y llega a fin de mes? «Haciendo muchos números, así que ya le digo cómo debe estar el que gane menos que nosotros. En otros trabajos hay personas que ganan menos, pero nosotros hemos arriesgado la vida por el ciudadano y eso no está pagado con lo que nos están haciendo». Sardón asegura que la falta de equiparación genera «desmotivación, pero la mayoría de los compañeros que hay en la Policía Nacional quieren al Cuerpo y se olvidan de lo mal pagado que está y dan hasta su vida»

JUSAPOL nació en la comisaría de Palencia cuando un grupo de agentes «con mucha ilusión» decidieron cambiar las cosas. El pasado viernes juntaron más de 18.000 polícias, al que también se unieron guardias y se manifestaron en Madrid para pedir la equiparación salarial con las policías autonómicas. El próximo día 27 y el 3 de noviembre se concentrarán en las subdelegaciones del Gobierno.

«He visto pasar a todos los gobiernos desde Felipe González, Aznar, Zapatero... y todos nos prometen que vamos a ser equiparados o subirnos el sueldo, pero ninguno de ellos lo cumple. Votos sí, pero reconocimiento de un Cuerpo que es el que va a sacarles las castañas al pueblo, no les interesa». «Nos han hecho muchas promesas incumplidas», destaca Sardón.

Asegura que ha visto con «mucha pena» lo que ha ocurrido con sus compañeros en Cataluña porque «somos uno de los cuerpos más valorados, pero por culpa de los políticos siempre el que paga el pato es el de abajo y el que da la cara es el que está abajo y esos somos nosotros». Con todos los años de carrera policial que lleva a sus espaldas ha visto fundar la Ertzaintza y los Mossos y considera que «ellos se sintieron siempre los reyes y se reían de nosotros, entre otras cosas por los sueldos».

Dice que la desigualdad existe con la policía autonómica «desde siempre». «Quiero el mismo sueldo por el mismo trabajo que hacen esos señores, no esas diferencias. Es que es una diferencia muy abismal, no estamos hablando de 20-40 euros sino de 600-700 euros al mes y con eso, ¿cuántas familias podrían comer por ahí?», se pregunta. « Yo no pedía esos 700 euros antiguamente, pero pedía que se nos subiese, pero nunca nos han tenido en cuenta.Espero que a estos chavales les toque vivir cosas menos malas que las que me tocaron vivir a mí y que consigan que se reconozca lo que nosotros no pudimos».