Setenta diputados del Parlament estarán en la tribuna de invitados

Por fortuna, la tribuna de invitados del Congreso de los Diputados tiene aforo para acoger a unas 160 personas y, por tanto, habrá localidades suficientes para sentar a la numerosa comitiva catalana (compuesta de unos 70 parlamentarios) que mañana se desplazará a Madrid para presenciar el debate que han impulsado CiU, ERC e ICV para solicitar la competencia sobre referendos. «No sé si habrá tantas sillas», llegó a decir con ironía el portavoz parlamentario del PSC, Maurici Lucena, uno de los que seguirán en persona la sesión donde los soberanistas pedirán formalmente la titularidad de la competencia sobre referendos. Diputados de todos los grupos (salvo de la CUP) han confirmado su asistencia a una sesión que marcará un punto de inflexión en el proceso independentista en Cataluña, ya que los soberanistas han dejado claro que el proceso del «derecho a decidir» (el eufemismo que usan para disfrazar la autodeterminación) proseguirá en la comunidad catalana pese a la derrota que experimentarán en el Congreso.

Hasta 25 personas integrarán la comitiva de CiU, aunque entre ellas no figurará Artur Mas, que ha dejado la representación de su Gobierno en manos del conseller de la Presidència, Francesc Homs, y del conseller de Agricultura, Josep Maria Pelegrí. Por parte de ERC, la expedición también será amplia, ya que viajarán casi todos sus diputados (tiene 21 en el Parlament), pero no su líder, Oriol Junqueras. Quien también viajará casi al completo es el grupo del PP catalán (19 diputados), con Alicia Sánchez-Camacho al frente. A ella se sumarán dirigentes destacados del patido en Cataluña como el líder municipal del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, y el alcalde de Badalona, Xavier García Albiol. El PSC también enviará a sus dirigentes más representativos, su primer secretario, Pere Navarro, y su portavoz parlamentario, Maurici Lucena. Diputados críticos del partido y afines a la línea del derecho a decidir podrían colarse también en la comitiva catalana. La delegación la completarán cinco diputados de ICV y dos de Ciutadans. Tan numerosa es la comitiva que un dirigente con experiencia en el PSC recordó que «es incluso mayor que la que acudió a la tramitación del Estatut». En aquella ocasión, en noviembre de 2005, Artur Mas, Josep Lluís Carod-Rovira y Manuela de Madre defendieron la reforma del Estatut en el Congreso de los Diputados y casi un centenar de personas venidas de Cataluña presenciaron el debate, aunque muchas de ellas pertenecían a la sociedad civil y no a la clase política. En esta ocasión, Mas seguirá el debate por televisión desde el Palau de la Generalitat y, al término del mismo, ofrecerá una declaración para valorar la sesión en el Congreso. Es de prever que el presidente de la Generalitat insista en que Cataluña seguirá su camino hacia la autodeterminación mediante mecanismos legales que creará el Parlament (Ley de Consultas), pero probablemente no precipitará la agenda independentista, puesto que Mas está molesto con el papel que está adoptando la Asamblea Nacional Catalana, debido a que esta entidad ha optado por definir una hoja de ruta hacia el Estado catalán que no corresponde a sus funciones.