Gobierno de España

«Si mi partido quiere repetiré como candidato»

Rajoy anuncia que presentará el Plan de Estabilidad a la Comisión Europea en abril, «estemos en funciones o no»

Rajoy destacó que «España ha hecho un gran esfuerzo y se ha valorado» en Europa
Rajoy destacó que «España ha hecho un gran esfuerzo y se ha valorado» en Europalarazon

Tras su intervención, Mariano Rajoy respondió a las preguntas de Gloria Lomana, directora de Informativos de Antena 3; Julián Cabrera, director de los Servicios Informativos de Onda Cero, y Pilar Gómez, subdirectora de LA RAZÓN.

–GLORIA LOMANA: Si fracasa la investidura de Pedro Sánchez, usted ha dicho que aceptaría un nuevo encargo del Rey, y yo le digo: ¿por qué ahora sí y antes no? Ahora tampoco contaría con apoyos. C’s da por cerrado el acuerdo con PSOE y Rivera quiere reunirse con usted para pedirle la abstención para que apoye a Sánchez. Las posiciones estarían aún más lejos.

–MARIANO RAJOY: No he ido a la investidura por algo que se entiende muy bien: la Constitución dice que al debate se va para ser investido presidente, y cuando uno tiene la absoluta certeza de que es imposible de que sea investido, no tiene sentido comparecer ante el Congreso. Yo la tenía, y así se lo dije al Rey. Me iba a votar en contra más de la mayoría absoluta. Podemos y PSOE iban a votar en contra. Además, no les hice perder el tiempo a los españoles, porque no estamos en situación de ello. Su Majestad encomendó a Sánchez que se sometiese a la investidura, y éste entendió que iba a tener los apoyos suficientes. Así, éste necesitaba o entenderse con el PP o con Podemos porque cualquier otra situación haría imposible su investidura.

Sánchez se ha reunido este mes con empresarios, sindicatos y agricultores, lo que me parece bien, pero cuando se trata de ser investido, conviene que se reúna con los que pueden investirle, y con el PP no se ha reunido nunca porque ha dicho que de nosotros no quería nada. Tenía que haberse reunido con Podemos, pero con éstos sólo se reunió un día a la vez que con C’s, sabiendo que Podemos le había advertido de que si pactaba con C’s ellos no iban a pactar. Sánchez no tiene los votos para la investidura y no va a conseguirlo porque ha despreciado a quien podía dárselos. Yo he hecho un planteamiento irreprochable y quiero lo mismo que en Alemania. Allí ganó el PP y el segundo partido fue el socialdemócrata. En ese caso los socialdemócratas fueron responsables y no hicieron una coalición con la izquierda, sino un pacto presidido por el partido que ganó y vicepresidido por ellos. Es lo que ocurre en quince partidos de la UE. Son gobiernos sensatos y que representan a la mayoría. Es inaudito que algunos sostengan que tiene que gobernar el que no ha ganado las elecciones.

–G. L.: ¿Sería el candidato del PP sí o sí, si hay que ir elecciones, más allá de lo que digan las encuestas? ¿Y si hubiese voces críticas en el partido? Ninguna de las dos situaciones es agradable...

–M. R.: Si hay voces, estoy seguro que aunque a mi no me lo cuenten, que hay gente en ello. Mi intención si hay elecciones es presentarme, y sólo necesito una cosa: que me apoye mi partido. Hasta ahora he tenido la fortuna y la suerte de recibir el apoyo de mi partido, y lo ha hecho en situaciones muy difíciles, pero creo tener el respaldo de muchos. He sido su candidato cuando gané las elecciones hace dos meses. Algunos escriben o dicen: «¡Oye, que Rajoy tiene que dimitir!», y yo me pregunto, ¿Y el que quedó segundo y tercero y cuarto? Entonces no quedaría nadie. Si mi partido quiere, estoy dispuesto a dar esa batalla como he ganado otras.

–JULIÁN CABRERA: La Comisión Europea recordaba ayer que en abril hay que presentar un Plan de Estabilidad y una serie de reformas económicas que abunden en las que se están llevando a cabo. ¿Corremos el riesgo de empezar a no hacer esos deberes y de que lo conseguido en los últimos cuatro años se vaya por el sumidero de la inestabilidad política?

–M. R.: Hay que presentar nuestro escenario de déficit público y el conjunto de reformas que pretendemos seguir haciendo para mejorar la competitividad de la economía y ya lo estamos preparando. Siempre hemos dicho que reducir el déficit público es algo capital y por reducir el que nos encontramos por encima del 9%, hoy lo hemos dejado a la mitad, con dos años de recesión y con los ingresos públicos cayendo. España ha hecho un gran esfuerzo, se ha valorado y a España se la tomó en serio. Nuestra prima de riesgo, que llegó a ser de 639 puntos básicos, hoy está en ciento y pico. Estuvimos al borde de la quiebra y al borde del rescate, y se me presionaba para que pidiera el rescate. Recuerdo que el bono a 10 años llegó a estar al 6 o al 7% y luego España se ha financiado a intereses negativos. Cuando uno hace las cosas bien, los resultados se acaban produciendo por muchas que sean las dificultades. Hay países en Europa que por hacer experimentos han empezado a ver cómo su prima de riesgo se duplicaba. Vamos a intentar seguir reduciendo el déficit porque es positivo para España y es un compromiso con Europa.

En segundo lugar está el plan nacional de reformas, que es el plan que tiene un país para mejorar la competitividad de nuestras empresas y, por tanto, crear empleo, mejorar el bienestar de la gente, para recaudar y poder mantener los servicios públicos. A lo largo de estos años hemos hecho toda suerte de reformas y son las que se quieren derogar ahora por este Gobierno que se ha anunciado. Y pretenden que votemos para derogar las reformas que hicimos y que han dado los resultados que todo el mundo conoce. La reforma laboral yo no la voy a derogar. Hay que hacer reformas y creo que no se deben derogar las que se hicieron, porque han dado lugar a que hayamos pasado de un crecimiento negativo del 2,1 a un crecimiento positivo del 3,2, que es el mayor de los grandes países de la UE. Mi intención es plantear el Plan de Estabilidad y nuestro plan nacional de reformas, estemos en funciones o no. Lo ideal es que hubiera un Gobierno y que fuera el del sentido común, el que da un buen mensaje fuera.

–J.C.: Hay importantes dirigentes territoriales de su formación que se han pronunciado sobre la idoneidad de que los congresos del partido se llevan a cabo de forma abierta, lo más parecido a unas primarias, buscando el voto directo de la militancia. ¿Esa música le suena bien? ¿Lo ve exportable al ámbito nacional del partido? ¿Se ve usted a medio o largo plazo, si no logra gobernar, como presidente del PP y jefe de la oposición?

–M. R.: Nosotros tenemos un sistema que es por delegados. Los militantes eligen a los delegados y ésos son los que votan. Nos hemos manejado con ese sistema y el partido ha funcionado. Es un partido consolidado, tiene muchos apoyos entre los ciudadanos... Pero yo no renuncio a mejorar el funcionamiento del partido. Tenemos que tomar decisiones para que las cosas se hagan bien. No podemos hacer como el PSOE, que hace primarias y luego le hacen una gestora en Madrid y le cambian la cerradura. Cuando tengamos el próximo congreso podemos estudiar fórmulas para hacer planteamientos mejores y más eficaces. En cuanto a si me veo como jefe de la oposición y presidente del PP, yo me veo en muchos sitios, tengo fuerza para hacer muchas cosas y muy diversas.

–PILAR GÓMEZ: Rivera le ha planteado que quería reunirse con usted antes del día 5. Quería saber si ya le ha llamado y si se va a producir esa reunión.

–M. R.: Efectivamente, el señor Rivera me ha mandado una carta. Me ha dicho que ha llegado a un acuerdo con el Partido Socialista para que Pedro Sánchez sea presidente, y me ha dicho que el documento que yo envié en su día al señor Rivera lo había leído, cosa que hasta hoy yo desconocía, y que le parecía muy razonable. Y que él pensaba que lo que había acordado con Sánchez podía encajar en esos planteamientos que yo le hice. Y yo le he dicho que no hacía falta que me mandara ninguna carta porque podía descolgar el teléfono como ha hecho siempre y yo le contestaría, y que se podía hablar con tranquilidad. También le dije que yo respetaba sus decisiones y los acuerdos a los que pudiera llegar, como es lógico. Si el señor Rivera considera que el señor Sánchez tiene que ser el presidente del Gobierno y que eso es lo que han decidido los electores del señor Rivera, pues yo no tengo nada que decir, simplemente tengo que respetarle. Ahora, también le dije, en justa reciprocidad, que no sería malo que respetase las decisiones que tomase el PP. Resulta que al PP se le pide lo siguiente: se le pide que vote al señor Sánchez. Y se le pide después de que el PP haya ganado las elecciones. Somos la primera fuerza y se nos pide que votemos al señor Sánchez. Se nos presenta un contrato de adhesión, llegan a un acuerdo, en el cual se nos excluye a nosotros y ahora se nos dice: aquí está este papel y usted lo firma. Se presenta un documento en el que se dice que se van a derogar todas las reformas que nosotros hemos hecho. Luego, el señor Sánchez no habla con nosotros, no quiere hablar. Porque, como ustedes saben, se ha negado a hablar con nosotros. Y además ha dicho del PP que no quiere ni el voto a favor, ni el voto en contra, ni quiere la abstención. Y que su única línea roja es que no gobierne el PP. Entonces, yo tengo que votar eso, porque el señor Rivera ha decidido que tiene que votar eso. No me parece justo ni razonable. Yo me reúno las veces que quiera, pero le agradecería que no me tome en cuenta.

–P. G.: Si el señor Rivera y el señor Sánchez, en esta suerte de cálculos que ellos hacen, después del día 6 le proponen una gran coalición PP-PSOE-C’s, pero sin que usted sea presidente, ¿qué les diría?

–M. R.: No creo que se les ocurra decir eso. Es que antes de hacer ese planteamiento tienen que ponerse de acuerdo a quién quieren como tercer socio, porque ellos dos solos, en este intento de engañar a la gente, no pueden gobernar, necesitan un tercero. Entonces, el señor Rivera parece que quiere que el tercer socio seamos nosotros, por el afecto que nos tiene, sin duda alguna, pero el señor Sánchez quiere que no seamos nosotros, quiere que sea Podemos, porque su línea roja es que el Partido Popular no esté dentro de este acuerdo. Entonces conviene que se pongan de acuerdo en resolver este problema, porque si no va a llegar la investidura la próxima semana y no van a tener los apoyos ni los votos suficientes y la gente se va a dar cuenta de que la han engañado. Y además, figúrese usted que el señor Rivera nos convenza a nosotros y que el señor Sánchez convenza a Podemos, entonces puede ser a cuatro. Es que esto es una broma, que es lo que no le han dicho al conjunto de los españoles.