TV3 hará huelga durante la emisión de las palabras del Monarca

Los catalanes que quieran ver el discurso del Rey mañana a través de TV3, la televisión autonómica, no podrán. Los trabajadores han decidido hacer huelga y paralizar la normal emisión del canal justo en el momento en el que Su Majestad dirija unas palabras a los españoles. La fecha y la franja horaria no han sido escogidas al azar. La plantilla realizará otro paro el último día del año.

El pasado jueves, el comité de empresa de la Corporación Catalana de Medio Audiovisuales (CCMA) aprobó y convocó huelga para los próximos días 24 y 31. Fijó que el paro de Nochebuena se produzca entre las 20:50 y las 21:20 horas. Está previsto que el Rey ofrezca su mensaje desde las 21:00 horas y hasta las 21:10 horas. Sin embargo, la parrilla de la televisión catalana no especifica que se corte la emisión y apunta que sí se emitirá el discurso de Don Juan Carlos según lo previsto por Casa Real.

El paro de Nochevieja aún está por concretar. Los trabajadores todavía no tienen claro en qué horarios desconectarán la programación habitual. Precisamente, ese día se celebrará a las 11:00 horas el primer sorteo de La Grossa, una suerte de Gordo pero a la catalana. Además, también peligra la emisión de las particulares campanadas organizadas por la televisión autonómica. Este año, está previsto que la retransmisión se realice desde la Fuente de Montjuïc de Barcelona, donde, también por primera vez, se llevará a cabo una gran fiesta que tratará de emular a la celebración de Times Square de Nueva York o la plaza del Sol de Madrid. Pero hasta que el comité de empresa de la CCMA no concrete cuándo se harán los paros ese día, la programación prevista pende de un hilo.

El discurso que sí tiene a bien emitir íntegro TV3 es el del presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas. A las 21:00 horas del día 30 de diciembre, dará comienzo el «speach» del líder del Ejecutivo catalán frente a las cámaras autonómicas y en el que, previsiblemente, Mas cite el proceso secesionista y, concretamente, la consulta independentista. Ahora que el Gobierno catalán ya tiene fecha y pregunta del referéndum y que ha dado el pistoletazo de salida a la conmemoración del Tricentenario de 1714, sólo le resta tratar de aunar una mayoría que dé alas a su objetivo final: la independencia.

Con todo, no es la primera huelga a la que están llamados a sumarse los trabajadores de TV3. Cámaras, presentadores, periodistas, técnicos, documentalistas, editores, etc. han protagonizado en los últimos meses múltiples paros. Primero lo hicieron contra los rumores de que la televisión catalana iba a sufrir drásticos recortes en recursos materiales y humanos. Luego, cuando las decisiones políticas se impusieron, los trabajadores del canal público siguieron manifestando su rechazo con paros y movilizaciones, llegando incluso a organizar un acto lúdico festivo en defensa de TV3. Pero la realidad es que han visto cómo se rescindían más de 230 puestos de trabajo, reduciendo la plantilla en un 20 por ciento. Y, por otro, están siendo testigos de la externalización de los servicios de gestión y explotación de la publicidad, lo que, según los empleados, les resta aún más autonomía. De ahí que no cejen en su empeño de demostrar su indignación y hayan incluso pedido la dimisión de la cúpula directiva.

Una televisión a medida

A pesar de haber realizado numerosos paros contra los recortes impuesto por el Gobierno de Mas, ninguno de ellos ha perjudicado al mensaje secesionista. No se ha boicoteado en ningún momento el discurso de una autoridad, como sí quiere hacerse ahora con las palabras del Rey. Al contrario, la televisión autonómica lleva meses sirviendo al proceso soberanista.

El servilismo se ve claro si, como ya denunció este diario, se comparan los recursos que TV3 volcó en la retransmisión de la Vía Catalana, la cadena humana organizada en favor de la independencia la pasada Diada, y con los destinados a mostrar los actos organizados por la Hispanidad o el Día de la Constitución. Durante más de 14 horas, la televisión catalana se cercioró de grabar imágenes en directo de la Vía Catalana, mientras que la conmemoración de la Constitución apenas ocupó cuatro minutos en el telenoticias.

La censura vuelve a ETB

La televisión pública vasca ETB no emitirá el tradicional mensaje navideño de Don Juan Carlos estas navidades en una vuelta a la postura que mantiene esta cadena siempre que el lendakari pertenece al PNV. El año pasado fue excepción pues aún permanecían en sus puestos las personas designadas por el socialista Patxi López. El Gobierno vasco eludió asumir la responsabilidad de tal decisión y por boca de la consejera de Cultura, Cristina Uriarte, dejó claro que decisiones de ese tipo corresponden a los órganos directivos de la televisión pública y no al lendakari, Íñigo Urkullu, que «no decide ni programas ni contenidos» en ETB.