«Una nueva forma de liderar Europa»

Nuevos monarcas, nuevas perspectivas de relaciones bilaterales. Ayer, los Reyes hicieron en Europa su primera parada en la ruta de visitas por los países europeos en un viaje relámpago que se definió por los gestos. Un día muy institucional que significó una declaración de buenas intenciones de cara a las relaciones en el futuro. En el Palacio de Noordeinde –en el que Guillermo y Máxima de Orange no residen, pero sí desarrollan su actividad institucional–, comenzó la jornada. Apenas pasado un año desde la última vez que los representantes de la corona vecina visitaran España, se percibió en el saludo el «relevo» generacional de la Monarquía española, ya que en aquella ocasión Doña Letizia, como Princesa de Asturias, tuvo que hacerle la reverencia a la ya reina Máxima, mientras que ayer ya fue un afectuoso recibimiento de igual a igual. Después de un encuentro privado y un almuerzo, los reyes de Holanda despidieron a sus regios invitados en la puerta del Palacio, donde se protagonizó la anécdota del día cuando Felipe VI no pudo darle dos besos a la reina de Holanda por el tamaño de su pamela, lo que ella supo resolver con una espontánea carcajada. Según informan fuentes de Zarzuela, ambas Casas han sellado su cooperación de cara al futuro, ya que el rey Guillermo obsequió a Doña Letizia con la máxima distinción de la Monarquía de los Países Bajos: la condecoración de la Orden de la Corona –el hecho de que ella fuera la destinataria y no el Rey se debe a que él ya la tiene–. Por su parte, al tratarse de la primera vez que Felipe VI se encuentra con su homólogo desde que un avión de Malasyan Airlines se estrellase en Ucrania, accidente en el que perdieron la vida 173 holandeses, el Jefe de Estado aprovechó para trasladar sus condolencias.

En un programa muy parecido al que siguieron Guillermo y Máxima cuando vinieron a España, los Reyes dieron un giro político al contenido del viaje y se desplazaron al Senado y a la Cámara de representantes, lo que equivaldría al Congreso en España, para entrevistarse con las presidentas de ambas Cámaras. Según informan fuentes diplomáticas, tanto Ankie Broekers-Knol como Anoucha van Miltenburg coincidieron al abogar porque ambas coronas colaboren «en una nueva forma de liderar Europa», ya que, al pertenecer a una misma generación, «comparten intereses, valores y formas». Después de la reunión, Don Felipe y Doña Letizia se dirigieron a la sala de debate parlamentario más antigua de Europa en uso, desde 1650. Felipe VI se mostró muy receptivo a las explicaciones históricas, especialmente cuando miraron a un techo con pinturas de personajes de distintos países para recordar a las autoridades que cualquier movimiento podrá ser juzgado.

Antes de regresar a España, Don Felipe y Doña Letizia mantuvieron un encuentro con el primer ministro, Mark Rutte. Según informan fuentes diplomáticas, despacharon sobre temas actuales que conciernen a la Unión Europea en materia económica y de energía –el minsitro de Industria y Comercio, José Manuel Soria, ha acompañado a los Reyes en esta visita–, concretamente respecto al Cambio Climático. Rutte tuvo unas palabras de reconocimiento para Don Felipe en su puesta de largo internacional en la ONU, ya que alabó sus dos intervenciones.

Felipe VI, en la televisión holandesa

El Rey hizo balance ayer de la visita a La Haya. Y no fue precisamente con la prensa española, sino con un periodista de la cadena pública NOS. Al término de su encuentro con el primer ministro de los Países Bajos, Mark Rutte, Don Felipe aseguró que tanto él como Doña Letizia estaban «encantados con el viaje». Eso sí, lamentó que éste no haya sido de mayor duración, ya que le ha resultado «muy corto». No obstante, aseguró haber mantenido «unas entrevistas muy buenas» con «sus majestades, el primer ministro y las presidentas de las Cámaras».