In extremis

Guardiola cierra un pacto con Vox en Extremadura y cede una consejería a los de Abascal

María Guardiola será presidenta de la Junta y Vox se hará cargo de la Consejería de Gestión Forestal y Mundo Rural

El Partido Popular y Vox han cerrado el codiciado acuerdo de Gobierno en Extremadura. Un pacto por el que la líder del PP extremeño, María Guardiola, será la presidenta de la Junta y la formación que lidera Santiago Abascal se hará con una única Consejería, la de Gestión Forestal y Mundo Rural.

Así lo han confirmado ambas formaciones en un comunicado conjunto, en el que explican que será la propia Guardiola quien rubrique este pacto junto al portavoz de Vox en la Asamblea extremeña, Ángel Pelayo Gordillo, a las 12.45 horas en el Parlamento regional.

Tras los "consejos" de Génova a Guardiola y su cambio de tono con Vox, este viernes llegaba el ansiado desenlace de una polémica que estaba provocando más de un quebradero de cabeza al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, en plena campaña electoral para las elecciones generales del 23 de julio. Con este pacto, se pretende poner punto y final a una situación que se enquistaba cada vez más, tras el pleno de investidura anunciado para el próximo 5 de julio, en el que el socialista Guillermo Fernández Vara se presentará de nuevo como candidato a presidir la Junta de Extremadura.

Y es que el miedo a que Fernández Vara pudiera utilizar ese pleno de investidura como un altavoz del "sanchismo" ha acelerado los tiempos. Ahora falta por saber si el barón socialista mantendrá su intención de presentarse a la investidura, pese a que los números no le dan, como "arma electoral" contra el PP.

Revertir las políticas socialistas

Ante esta situación, ambas formaciones subrayan que "han asumido la responsabilidad de dotar a la región de un gobierno estable y con una hoja de ruta clara para poner fin a las políticas socialistas que han lastrado el desarrollo de Extremadura". Y en esta línea, PP y Vox señalan que "para ello, ambas formaciones han centrado sus esfuerzos en alcanzar los puntos en común y abordar las preocupaciones compartidas por sus votantes y por la mayoría de los extremeños".

Se trata de un acuerdo programático, con Consejeria incluida, y 60 medidas encaminadas a lograr"un gobierno del cambio", que les permita revertir "las consecuencias de la inercia política del PSOE en los últimos años". Su objetivo, según explican en este comunicado, es centrarse "en las prioridades de las familias extremeñas, y en combatir el paro, la pobreza, la falta de oportunidades y la despoblación". Finalmente, concluyen que dichas medidas "tendrán repercusión directa en los presupuestos generales de la Comunidad Autónoma de Extremadura en cada ejercicio".

Las advertencias de Génova

El ruido que llegaba desde Extremadura estaba distorsionando el mensaje nacional del PP y generando interferencias en el electorado del centroderecha. La imagen de pelea desmoviliza al votante de PP y Vox, para el que la prioridad, por encima de todo, es sacar a Pedro Sánchez de La Moncloa.

Por ello, Génova medió con el objetivo de rebajar la tensión y la imagen de «batalla campal» que estaban dando los dos partidos en Extremadura, y que desentonaba con la que sostiene el PP en el resto de comunidades y, sobre todo, con la posición del PP en la Comunidad Valenciana. Una estrategia que empezó a dilucidarse hace unos días cuando Guardiola pidio unos días más a la presidenta de la Asamblea para poder llegar a un acuerdo de "respeto" con Vox.

Y es que este pacto se antojaba muy difícil tras las primeras y duras declaraciones de Guardiola tras saber que la formación de Santiago Abascal no entregaría al PP la presidencia de Extremadura "a cambio de nada". Ahora, habrá que esperar para ver cómo se articula esta nueva consejería diseñada para Vox.