La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, se dispone a entrar en la fase final de su proyecto de escucha. Sumar ya ha recorrido buena parte de la geografía española. 11 de 17 comunidades autónomas –a excepción de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla–. A la par, las conclusiones de su plataforma se encuentran también en una fase muy avanzada y se conocerán, en principio, antes de que termine de recorrer el país.

Este fin de semana celebrará dos actos más de escucha, que tendrán lugar en Albacete y en Murcia. Estos dos son territorios más hostiles para la vicepresidenta, porque cuentan con barones autonómicos netamente morados. En Castilla-La Mancha, el coordinador autonómico morado es José Luis García Gascón, quien defendió la necesidad de que los morados tengan el «peso que les corresponde» en el proyecto de la vicepresidenta. En Murcia, el líder autonómico es Javier Sánchez-Serna, coportavoz de Podemos.

Tras este fin de semana, la vicepresidenta acudirá a Santander con Sumar –previsiblemente la próxima semana– y después, durante el mes de marzo y abril, visitará Canarias, Andalucía y Cantabria. Un camino que la vicepresidenta compagina con su agenda de Gobierno y por lo que, fuentes de Sumar, prefieren no poner una fecha redonda al fin del proceso. Entonces, Sumar pondrá fin a su gira autonómica y estará en condiciones de ofrecer ese «contrato social» a la ciudadanía que prometió a sus inicios para «la próxima década». El fin del proceso de escucha coincidirá con la precampaña electoral para las elecciones autonómicas y municipales. Tras terminar de poner a punto Sumar, la vicepresidenta prevé seguir organizando actos políticos con su plataforma, según confirman fuentes de su equipo. Unos actos que podrán coincidir con los actos de precampaña para el 28-M pero que, no tendrán ese mismo sentido político. Serán, en principio, actos sectoriales como los que ya ha celebrado en los últimos meses. El primero versó sobre la transición ecológica, pero también ha promovido otros con colectivos LGTBi, o del ámbito santiario. Según explican desde su equipo hay muchos sectores que piden a la plataforma celebrar reuniones oficiales.

La vicepresidenta todavía no desvela sí hará campaña o no por Unidas Podemos de cara a las elecciones autonómicas, aunque sí confirmó hace meses que apoyaría la candidatura de la alcaldesa Ada Colau en Barcelona. La de apoyar a Podemos en los comicios de mayo es una de las reclamaciones que con más fuerza hacen en la sede de Podemos con el objetivo de conseguir mayor apoyo en las urnas. Sin embargo, de momento, la vicepresidenta prefiere esperar a que se definan todos los pactos autonómicos entre Podemos, IU Más País y Compromís.

Las negociaciones cogen impulso

La relación entre Sumar y el resto de partidos de izquierda continúa tejiéndose con menos fricciones que hasta ahora. Sumar ya ha mantenido reuniones con todas las formaciones a la izquierda del PSOE sobre el futuro electoral, aunque siguen sin desvelarse estas conversaciones. Todas las partes implicadas sí reconocen que se han intensificado las negociaciones, aunque no se da pistas sobre la conformación de la próxima alianza. Desde Podemos se explica que la vicepresidenta ha decidido posponer las negociaciones hasta el verano, una vez se celebren las elecciones autonómicas y municipales. En el cuartel general se preferiría actuar con mayor celeridad y comenzar a negociar ya una "coalición de partidos". El resto de partidos, de momento, cierra filas con la vicepresidenta, aunque manda avisos claros. "Sumar no puede ser nunca amontonar", aseguró este martes el portavoz de Compromis, Joan Baldoví. Desde IU también respaldaron los tiempos de la vicepresidenta. "Vemos con mucha ilusión (el proyecto) y nos sentimos muy cómodos", aseguraron.