Psicología

El cambio de paradigma que necesitamos

El aprendizaje sobre esto, es que pasamos de un estado de seguridad, donde todo lo teníamos controlado, a un nuevo paradigma. Nos encontramos con un momento en el que de pronto, por seguridad, incluso nos tienen que decir cuándo podemos salir a pasear.

El aprendizaje sobre esto, es que pasamos de un estado de seguridad, donde todo lo teníamos controlado, a un nuevo paradigma. Nos encontramos con un momento en el que de pronto, por seguridad, incluso nos tienen que decir cuándo podemos salir a pasear.
El aprendizaje sobre esto, es que pasamos de un estado de seguridad, donde todo lo teníamos controlado, a un nuevo paradigma. Nos encontramos con un momento en el que de pronto, por seguridad, incluso nos tienen que decir cuándo podemos salir a pasear.Nano López

Estamos viviendo una situación totalmente nueva, especial y a la que nos tendremos que adaptar. Nano López, experto coach, nos habla de ello.

El aprendizaje sobre esto, es que pasamos de un estado de seguridad, donde todo lo teníamos controlado, a un nuevo paradigma. Nos encontramos con un momento en el que de pronto, por seguridad, incluso nos tienen que decir cuándo podemos salir a pasear.

Es difícil de entender. Al principio no nos damos cuenta, sin embargo a la larga esta situación se nos puede complicar.

No porque vaya a ser así a partir de ahora, si no porque nos hemos dado cuenta de nuestra vulnerabilidad.

Esta es una reflexión interesante. “Si un huevo se rompe desde fuera se acaba la vida, si se rompe desde dentro la vida comienza”

Podemos llegar a tener la sensación de que si las cosas cambian desde el exterior, vamos a perder nuestra propia identidad.

Muchas veces no nos damos cuenta del significado de las palabras. Cuando nombramos la palabra romper, directamente le damos una connotación negativa. Sin embargo, muchas veces es necesario romper con cosas para comenzar con otras.

Esta es una característica típica del sistema. Siguiendo leyes sistémicas desarrolladas por Hellinger, para que el sistema funcione debe de haber un equilibrio.

¿Y aquí dónde podemos ver nosotros el equilibrio?

Simplemente en tener nosotros la sensación de poder ofrecer algo al sistema.

La ley del equilibrio nos indica, que un sistema se crea por y para algo.

Principalmente porque necesitamos cosas (para nuestra supervivencia) y para conseguirlas.

Muchas veces cuando pensamos en la perpetuación de las especies, pensamos que tiene que ver más con los animales, y no nos paramos a pensar que nosotros formamos parte también de ese sistema llamado Existencia.

Un sistema compuesto de elementos, relaciones, conectados entre sí para conseguir un objetivo común.

Este siempre tiene que estar en equilibrio y nosotros descubrir si sentimos eso.

Para ello podemos plantearnos ciertas cuestiones. ¿Pienso que el sistema me está proporcionando lo que necesito? ¿Estoy proporcionando yo algo al sistema?

Cuando cumplimos una función en el sistema, tendemos a proporcionar un equilibrio necesario para que este permanezca en el tiempo.

Con lo cual, nos tenemos que fijar en qué espacio estamos actuando nosotros.

Solemos estar constantemente saliendo y entrando en los diferentes sistemas, y esto nos puede hacer llegar a, muchas veces, confundirnos en el lugar en que estamos actuando.

En estos momentos de confinamiento, nuestros pensamientos suelen ser mas individualistas, sin llegar a pensar en qué podemos ofrecer nosotros al sistema de la sociedad para que mejore.

Nos dejamos llevar por lo que vemos, escuchamos. Actuamos según los juicios morales de otros. No nos paramos a pensar en que seguimos siendo parte del sistema y a la vez responsables de que para seguir obteniendo algo, debemos aportar algo.

Estamos asistiendo a un nuevo resurgir del individualismo. Un movimiento social que empezó a crecer en el renacimiento. Una tendencia que nos lleva más al pensamiento único en el cual reclamamos mas libertades pero que tienen que ir acompañadas con mas responsabilidades personales.

Lo principal, un sistema global activo para que no desaparezca.

Por lo tanto, es momento de tomar una pausa en toda esta situación caótica.

Incentivar una fuente de motivación que nos lleve a pensar, que podemos hacer nosotros para mantener ese equilibrio tanto en nuestro sistema de sociedad, sin olvidar nuestro propio sistema como individuo.

Hay muchas personas que se quedan enganchadas en sentirse inútiles, por el simple hecho de no poder hacer nada ante la situación. Como por ejemplo pasar de un estado de producción totalmente activa, a un momento de no hacer nada.

El autodiscurso de “tengo que ser útil”, puede llegar a convertirse en una creencia limitante ya que me hace poner el foco solamente en uno de los sistemas en los que actúo. El sistema de trabajo (o productivo).

Hay que tratar de saber cómo interactuar en todos los sistemas en cada momento.

Esto puede hacer que el sistema fluya de mejor forma.

Debemos de hacer el ejercicio de salir de nuestro espacio y estar presente en qué tipo de necesidades no tenemos cubierta.

Estar presente sin juicios ni creencias limitantes que puedan desenfocar sus deseos. Saber respetar, actuar como responsables que somos.

Es importante compartir y relacionarnos con los demás de Siempre dar nuestro punto de vista haciéndonos visibles y no imponiendo nuestros deseos, y sobre todo fundamentar mis propios juicios y tratar de obtener una visión positiva.

Es el momento de crear nuevos objetivos. Si son demasiado grandes, y sentimos que no podremos con él, quizá deberíamos de comenzar en dividirlo en subjetivos lo suficientemente pequeños para acometerlos con la certeza de que lo conseguiremos al ciento por ciento.

Para ello busquemos objetivos que estén en linea con nuestros deseos y que cumplan con una serie de requisitos.

Deber ser especifico, preguntándonos ¿Qué?, ¿Quién? ¿Dónde?, ¿Cuándo? ¿Con qué?

Medible donde nos preguntemos, ¿Qué valor?, Qué cantidad?, ¿Cómo sabremos que está cumplido?

Saber que lo podemos alcanzar y sea motivante para nosotros.

Debe ser simultáneamente desafiante y realista , cree que lo lograremos y adquirir un compromiso con nosotros mismos para hacerlo.

Definir el plazo o cronograma para llevarlo a cabo.

Y algo muy importante, no solamente tenerlo en nuestra cabeza. Yo invito a escribirlo siguiendo estas pautas.

Todo esto, nos servirá para reactivar una actitud mucho más positiva a la hora de afrontar el nuevo paradigma que nos toca vivir.

Está en nuestras manos el tratar de ser felices.

www.nanolopezromero.com