La búsqueda del pecho perfecto

Los implantes mamarios aparecieron en el año 1962. Desde entonces millones de mujeres han pasado por el quirófano con el objetivo de mejorar sus mamas. El aumento de la esperanza de vida -sobre todo en las mujeres- y el deseo de verse atractiva y en forma, han dado como resultado un aumento en la demanda de estas intervenciones

Los implantes mamarios aparecieron en el año 1962. Desde entonces millones de mujeres han pasado por el quirófano con el objetivo de mejorar sus mamas. El aumento de la esperanza de vida -sobre todo en las mujeres- y el deseo de verse atractiva y en forma, han dado como resultado un aumento en la demanda de estas intervenciones. Otros factores, como la aparición de la menarquía temprana, la menopausia natural tardía o que muchas mujeres decidan no tener hijos, son situaciones que se relacionan con el aumento del riesgo de padecer cáncer de pecho, debido a una mayor exposición al estrógeno y la progesterona.

En todos estos casos, la opción de poder restaurar el pecho operado ha traído como resultado que, en modo creciente, un mayor número de mujeres opten por someterse a procedimientos de reconstrucción de senos.

Sea cual sea la causa, el caso es que, en el caso concreto de España, la operación de implante mamario es la intervención de cirugía estética más solicitada y, como ya se ha dicho, las razones que llevan a tomar esta decisión pueden ser varias: corregir algún defecto físico, mejorar el aspecto de las mamas, aumentar tamaño y volumen de los pechos, realizarse una reconstrucción tras una mastectomía, corregir la flacidez de senos provocada por el embarazo y la lactancia... Sea cual sea el motivo de la intervención, para el doctor Carlos Gullón Cabrero, cirujano plástico y socio director de FEMM Cirugía y Medicina Estética (Madrid) “un buen cirujano plástico siempre habrá de tener en cuenta algo antes de intervenir: cuando una mujer acude a su consulta con la decisión de someterse a una operación de aumento de pecho, debe tener en cuenta que el objetivo es, siempre, conseguir un tamaño de busto proporcionado a la estructura corporal de la paciente. Para ello habrá que seleccionar un volumen de implante mamario adecuado”.

Al final, lo que se ha de lograr es que no se note que el pecho ha sido operado, eliminando los estigmas que suelen acompañar a la cirugía plástica (principalmente, volúmenes desproporcionados) y consiguiendo formas y contornos naturales. Según explica el doctor Ramón Calderón Nájera, especialista en Cirugía Plástica, Reparadora y Estética “la mejor paciente será siempre aquella que, además de estar bien informada sobre lo que conlleva la cirugía que se va a practicar, tiene unas expectativas realistas sobre los resultados que va a conseguir”.

¿Qué es la naturalidad?

Pues, en el caso de la cirugía plástica, y, más concretamente, cuando hablamos de implantes mamarios, la naturalidad es algo que debe conjugarse con los gustos de cada cual. Y es que, según explica el doctor Carlos Gullón Cabrero “mientras algunas mujeres quieren que el aumento de volumen no traspase la línea de lo voluptuoso, en otros casos si que demandan esa voluptuosidad... aunque siempre buscando una igualdad de volumen, aunque con mayor prominencia en el área del escote”.

Para conseguir esa naturalidad, cada año van surgiendo innovaciones que, además de naturalidad, ofrecen, al paciente, una mayor efectividad y seguridad. Las innovaciones más importantes aparecidas en los últimos años, con respecto a este tipo de intervenciones son aumento de pecho con anestesia local, nuevas prótesis mamarias, la llamada técnica mixta, el plano dual y la técnica Triplanar.

Anestesia local y sedación mínima

La cirugía de aumento de pecho se ha hecho siempre con anestesia total. Esto, según las peculiaridades de cada caso, ha cambiado ahora, pudiéndose aplicar una anestesia local y una sedación mínima. En palabras del doctor Jesús Sánchez Martín, especialista en Cirugía Plástica, Reparadora y Estética “de este modo, la paciente permanece despierta durante toda la intervención. Es responsabilidad del cirujano, siempre buscando el más seguro resultado de la intervención, optar por la alternativa que más se ajuste a las necesidades y expectativas de cada paciente”.

Prótesis más resistentes

Un implante mamario, como cualquier otro tipo de implante corporal, siempre tiene asociado el peligro de romperse o de presentar alguna complicación. Las prótesis mamarias más modernas, además de tener una mayor resistencia a la ruptura, tienen la característica de ser más suaves y menos abrasivas. En opinión del doctor Carlos Guillón Cabrero “esto permite que la recuperación de los pacientes sea mejor, más rápida y menos dolorosa”.

Tres cirugías en una

Es conocida por el nombre de Técnica Mixta y responde al deseo del paciente de combinar tres cirugías en una sola intervención: aumento y elevación del pecho, más liposucción. Esta técnica puede combinar el relleno con grasa de la paciente con una prótesis de menor tamaño y que, por lo tanto, se nota menos. En opinión del cirujano Carlos Gullón “así se consigue un resultado más natural y con menos posibilidades de complicaciones futuras. Otra ventaja de esta técnica es que la paciente también mejora su silueta corporal, al mejorar su contorno tras la cirugía previa de liposucción para extraerle la grasa que después se utilizará para remodelar el pecho”.

Ni signo del hachazo ni doble surco

Dos de los complicaciones más habituales y tradicionales asociadas a la cirugía de aumento de pecho, el signo del hachazo y el doble surco, desaparecen con la aplicación de dos innovaciones en estas intervenciones: el plano dual y la técnica triplanar. El doctor Ramón Calderón Nájera explica el proceso “en la primera, el cirujano actúa bajo el músculo pectoral, pero separando, previamente, dicho músculo de la glándula mamaria. En el segundo de los casos, la cirugía se practica en tres planos distintos, lo que evita la presencia del mencionado doble surco”.

¿Una curiosidad para cerrar este artículo? Las gaditanas, como el resto de las andaluzas, demanda en las intervenciones de aumento de pecho un busto más grande que en las zonas del norte de España. Así, mientras que allí lo normal son implantes de unos 200 gramos, en Cádiz pueden pedir hasta 350.