“La sensación de las mujeres de hoy día (madres y trabajadoras) es de no llegar a nada”

Andrea Acha Susaeta es, junto a su marido, socia de Finest Golf Spain, agencia de viajes de golf y turismo de lujo en España, dedicada a golfistas extranjeros que, además de jugar al golf, quieran conocer las maravillas de nuestro país. La creó inspirada por la agencia de viajes de golf a EEUU de sumarido, GOLF EEUU que es, de hecho, co-fundador de Finest. Empezaron en el 2017 con un capital privado de tres mil euros. Hace seis meses fue madre por primera vez.

Andrea Acha Susaeta es, junto a su marido, socia de Finest Golf Spain, agencia de viajes de golf y turismo de lujo en España, dedicada a golfistas extranjeros que, además de jugar al golf, quieran conocer las maravillas de nuestro país. La creó inspirada por la agencia de viajes de golf a EEUU de sumarido, GOLF EEUU que es, de hecho, co-fundador de Finest. Empezaron en el 2017 con un capital privado de tres mil euros. Hace seis meses fue madre por primera vez.

-¿Cómo es su día a día laboral y como madre?

-Mi día a día está intrínsecamente unido a mi nueva situación de madre. De hecho, el crear Finest Golf Spain, se nos ocurrió a raíz de la empresa de mi marido, que lleva a golfistas a jugar y a hacer turismo en EEUU. Él viaja mucho a EEUU por la actividad de su empresa. Yo no puedo ni quiero estar tanto tiempo fuera de casa y por eso, pensábamos que la opción ideal tanto empresarial como familiar, era atraer golfistas extranjeros a descubrir y jugar en España. Por ahora estamos poniendo la empresa a punto y pensando en estrategias para atraer clientes. Gracias al apoyo externo que tenemos para cuidar a mi hijo de 11am a 7pm, puedo hacerlo.

-Así que necesita ayuda...

-Sí, es fundamental la ayuda. No podría hacer nada sin que alguien se encargara de mi hijo.

-¿Cree que las pymes o autónomas son las grandes perjudicadas en cuestiones impositivas?

-Todavía no he rodado como autónoma como para poder responder a eso.

-El hecho de ser madre, ¿le aporta mayor empuje que antes de serlo a la hora de trabajar?

-No necesariamente. Siempre he tenido el empuje interior de trabajar bien por mí misma, por aprender, evolucionar, mejorar, hacer el mejor trabajo posible allá donde estuviese. Lo que sí siento es una mayor responsabilidad. Ahora soy consciente de que tengo una persona que depende de mí y mi marido económicamente para poder vivir y tener las posibilidades de vida que he tenido yo. Supongo que te hace más consciente de tener y mantener ese empuje siempre.

-¿Cree que las mujeres que trabajan siguen teniendo doble carga con respecto a los hombres?

-Yo lo veo muy claro formulando esta simple pregunta: ¿Se implican tantas horas los hombres en el cuidado de los hijos y de la casa, como nosotras en nuestros trabajos? La respuesta es no en líneas generales, y hasta que no igualemos la implicación de ambos en todo, la carga recaerá más sobre nosotras.

-¿Se ha sentido alguna vez discriminada por ser mujer?

-No, porque siempre me he desenvuelto en un entorno donde había muchas mujeres trabajando.

- ¿Y por ser madre?

- No

-¿Cree que la maternidad está poco protegida en España?

-Muy poco. La sociedad ha avanzado pero el apoyo institucional se ha quedado obsoleto con la situación de familias en la que ambos trabajan y hay una familia que cuidar y mantener. Siempre he pensado que es un auténtico problema que los partidos políticos no trabajen a largo plazo, porque si ellos no se preocupan por crear ayudas con programas específicos para favorecer ser padres, ¿quién nos mantendrá como sociedad cuando seamos mayores en el futuro? Es un problema de todos. Además, una vez que has pasado por el embarazo y por ser madre, te das cuenta de la cantidad de ayuda que se necesita para poder estar bien física y mentalmente con la nueva situación. Yo la ayuda, no la encontré en nada que fuera promovido por el Estado. Por ejemplo, en Holanda tienes una especie de enfermera nada más parir, disponible para ti para cualquier cosa, que te atiende en tu casa. Ojalá tuviéramos esa suerte en España.

-¿Qué le gustaría que se modificase?

-Flexibilidad laboral, apoyo del Estado post natal y que se premie a las empresas que contratan a madres o mujeres.

-¿Qué opina de la “conciliación”?

-Que casi no existe. Para mi esta es la pieza angular del problema. Hoy día, si una mujer quiere ser madre y trabajadora, tiene que renunciar a uno de los roles. O bien no ve a sus hijos entre semana prácticamente, o renuncia a su proyección laboral y personalmente, creo que es respetable que la que quiera lo escoja, pero para las que queremos ser ambas cosas, debería haber una tercera opción que es la de flexibilidad laboral. Yo estoy convencida que las madres podemos ser igual o más productivas si cabe, pero los horarios necesariamente cambian, y si las empresas permitiesen esa flexibilidad que los padres necesitan, podrían seguir teniendo los resultados que buscan, solo que de una forma un poco menos rígida y no tan presencial.

-¿Disfrutó de su baja por maternidad o no le quedó más remedio que seguir trabajando?

-La disfruté.

-¿Se siente culpable por no pasar más tiempo con su bebé?

-No me siento culpable porque ahora tengo montada la vida de la mejor forma que se me ocurre para poder ver a mi hijo y poder trabajar. Espero poder mantener esta situación en el futuro, porque me siento realizada.

-¿Cree que en muchas cosas nos han “mentido” a la hora de hablarnos de la liberalización de la mujer que compagina casa, maternidad y un trabajo?

-Creo que nos han transmitido la imagen de superwoman que puede con todo, y sinceramente creo que se puede, pero a costa de tu salud. Las mujeres que llegan a todo o son realmente unas máquinas de la organización y tienen ayuda o tienen serios problemas de ansiedad. En mi grupo de amigas, a las que considero muy válidas, comentamos que “nos han engañado” -en plan broma-, pero hay cierto sentimiento amargo de que la vida que llevamos no es ni mucho menos la ideal, porque tenemos la sensación de no llegar a nada.

-¿Le gustaría que en España disfrutásemos de otros horarios más tipo nórdicos?

.,-Por supuesto que sí. ¿Dónde hay que firmar?