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¿Sufre tu bebé cólico del lactante? La reflexología podal puede ser tu gran ayuda

Renée Iglesias, una de las mejores reflexólogas podales infantiles nos da las claves

¿Sufre tu bebé cólico del lactante? La reflexología podal puede ser tu gran ayuda
¿Sufre tu bebé cólico del lactante? La reflexología podal puede ser tu gran ayudalarazon

Los cólicos del lactante suelen aparecer a las dos semanas y desaparecen espontñaneamente a los cuatro meses. Pero en ese tiempo los padres se desesperan porque no saben cómo ayudar. La reflexología podal es una magnífica solución.

Mi nombre es Renée Iglesias, soy naturópata y reflexológa podal, especialista en reflexología infantil. Y quiero hablarte de uno de los trastornos más habituales en los bebés: El conocido como cólico de lactante, siendo también una de las dolencias donde tú como madre o padre podrás ayudar a tu hijo gracias a la reflexología podal.

Podríamos definir este trastorno como un llanto incontrolable, exaltado, sin causa identificable, más frecuente a últimas horas de la tarde, y que suele aparecer en un lactante sano entre las dos semanas y los cuatro meses de edad. Acompañado habitualmente de rigidez y flexión de las piernas. Él bebé parece tenso, la barriga algo más hinchada, los puños apretados, expulsa gases y aparecen también espasmos intestinales. Son más frecuentes durante la tarde noche, no encontrándose ningún factor que desencadene esta situación.

El cólico de lactante no hace diferencia entre sexos y sí que parece ser algo más habitual en niños no alimentados con lactancia materna.

Es importante saber que a pesar de los episodios de llanto, tu hijo es un niño sano y que estos episodios desaparecerán de forma espontánea antes del cuarto mes de vida. Hasta que ese momento llegue, te propongo la Reflexología Podal para que puedas ayudarle de una forma natural. Se trata de una técnica sencilla, no invasiva, que potencia la salud y la capacidad de autorregulación del cuerpo. No tiene efectos secundarios y puede ser utilizada en cualquier edad.

La Reflexología está basada en el principio de que hay zonas reflejas en los pies que corresponden a órganos, glándulas y partes del cuerpo. Se trata de una técnica milenaria que activa los procesos curativos del propio cuerpo. Consiste en presionar y masajear las diferentes partes del pie, ya que en ellas están ubicados todos órganos del cuerpo, con el fin de aliviar, mejorar y restablecer el equilibrio homeostático del organismo, es decir el “equilibrio perfecto”.

Uno de los grandes beneficios de la Reflexología es estimular el funcionamiento de las glándulas endocrinas. Este sería un punto importante también en el caso de los cólicos de lactante, ya que uno de los factores que se podrían barajar serían los niveles altos de motilina, hormona que aumenta la motilidad intestinal (movimientos del intestino encargados de desplazar el alimento desde la boca hasta el ano)

No olvidemos que en otras culturas los cólicos ni siquiera están descritos o definidos, y casualmente son culturas en las que prima el apego constante, el porteo y el apoyo durante el puerperio.

A través de la Reflexología favoreceremos sin duda ese vínculo afectivo. El bebé se sentirá protegido, relajado y seguro. Potenciar el apego en esta etapa será fundamental y esta técnica te ayudará a lograrlo.

Siempre he sido de la opinión que quien mejor trata los pies de un bebé es su papá o su mamá, o aquella persona que esté cerca. Son ellos los que están en el día a día de ese pequeño, pudiendo utilizar esta maravillosa terapia a la demanda de su hijo. En el momento y lugar en que el niño lo precise. Se trata de una herramienta muy útil en el entorno familiar, proporcionándonos bienestar no solo a nivel físico sino también sino también emocional. Los bebés son sumamente receptivos a la estimulación de las zonas reflejas del pie. Su respuesta es inmediata y positiva.

El aprendizaje básico para aplicarlo en familia es muy sencillo, aunque se necesita invertir cierto tiempo para poder integrarlo. Sobre todo porque aprenderás a tratar el organismo de tu hijo desde un punto de vista global, es decir dando importancia tanto a la relajación, como el sistema urinario, inmunológico, respiratorio y, como no, el digestivo que es el que hoy nos ocupa.

En ningún caso estaremos sustituyendo la figura del pediatra y su tratamiento. Lo que intentaremos será, como antes he mencionado, potenciar el poder de autocuración del pequeño, despertando ese médico interno que todos tenemos. Te invito desde aquí a que conozcas lo que esta terapia puede aportarte y entrenes tus manos para hacerle un regalo especial a tu hijo. Ayúdale no sólo a nivel emocional con tu tacto hazlo también en el plano físico. Déjate guiar por esta maravillosa técnica “la Reflexología” Será tu aliada, tu amiga, tu compañera cuando en muchas ocasiones no sepas dónde acudir. Conecta con tu bebé a través lenguaje de tus manos, el lenguaje del tacto que tanto necesita ese pequeño. Un idioma que los dos entenderéis.

También sería fundamental dar importancia aquí al estado emocional y físico de esa mamá; que agotada, a veces llena de miedos e inseguridades, transmite al bebé toda esa angustia, y ese niño incapaz de gestionar todo esto lo expresa a través de este malestar. Empoderar y cuidar a esa madre será también posible a través de la Reflexología Podal.

Renée Iglesias trabaja en el Instituto de Reflexología Especial de Madrid