Turismo

Esta es una de las playas menos masificadas de Galicia que permite acceder a pie hasta una isla

El arenal, de difícil acceso y de arena blanca y fina combinada con cantos rodados, ofrece aguas tranquilas para disfrutar del baño y del verano

Playa de Santo do Mar.
Playa de Santo do Mar. Turismo de Galicia

De norte a sur, las Rías Baixas descienden desde la de Muros-Noia, hasta la de Vigo pasando por las de Arousa y Pontevedra. A vista de pájaro se presentan como una concatenación de suaves entradas y salidas que configuran una especie de peine amorfo que cubre el litoral gallego hasta Fisterra.

Un espacio donde se recortan acantilados bravos y rocosos en contraste con amplios arenales a los que se puede acceder desde tierra o desde mar, y que aguardan, desde siempre, al visitante.

Isla de O Santo
Isla de O SantoT. NietoLa Razón

Playas más o menos conocidas, con mayor o menor extensión, todas con su encanto, y, también, con más o menos gente. Porque ahí, en las Rías Baixas, se esconde también algún pequeño arenal en el que huir de la masificación propia de estos días de verano.

Es el caso de la playa de Santo do Mar (Pontevedra), un lugar al que se puede llegar desde Marín, siguiendo la carretera dirección a Bueu (C-550). Una vez en Casás debe tomarse la desviación a la derecha, arribando, al poco en este arenal.

Una estrecha playa de difícil acceso, de forma rectilínea, de arena blanca y fina combinada con cantos rodados y con aguas tranquilas para disfrutar del baño. Apenas 350 metros pertenecientes a la parroquia de Ardán y con un paraje difícil de olvidar.

Porque enfrente de la playa del Santo surge, tranquila y misteriosa, la Isla de O Santo do Mar o de San Clemente.

Playa e isla están unidas por un istmo arenoso que es posible atravesar a pie cuando la marea está baja. Si uno decide llegar hasta el islote podrá comprobar como en él descansan todavía los restos de una capilla que podrían haber formado parte de un conjunto arquitectónico más grande.