Sanidad pública

El Hospital de Montecelo (Pontevedra) abre una nueva puerta a la vida

Practica por primera vez en su historia una donación de órganos con asistolia controlada, es decir, con el corazón parado

Hospital de Montecelo.
Hospital de Montecelo. Wikipedia

La donación con asistolia controlada es aquella en la que los órganos se extraen de un paciente después de que se produzca la parada irreversible de su circulación sanguínea. Frente a ella se sitúa la donación por muerte encefálica, más habitual debido a que cuando se produce este fallecimiento, el corazón sigue latiendo, lo que reduce el daño al que se exponen los órganos antes de su extracción.

No obstante, ambos tipos de donación resultan válidas, más, si cabe, en la mejora del sistema de transplantes con vistas a aumentar la disponibilidad de órganos. En este marco, el Hospital de Montecelo (Pontevedra) tenía hoy programada la primera donación de órganos con asistolia controlada de su historia.

Para abordar este tipo de donaciones con asistolia controlada, y tal y como han explicado hoy los responsables de la Oficina de Coordinación de Trasplantes del área Sanitaria de Pontevedra y O Salnés durante la presentación del balance de 2024, ésta cuenta con un protocolo que, desde febrero del pasado año, controla donaciones de órganos provenientes de pacientes con daño cerebral catastrófico, enfermedades neurodegenerativas, cardíacas o respiratorias en fase terminal.

A este respecto, el doctor Jose Luís Martínez Melgar ha subrayado que “este protocolo facilita la gestión de nuestras donaciones en asistolia en el Complejo Hospitalario Universitario de Pontevedra, iniciativa integrada en la planificación de los cuidados integrales al final de la vida de los pacientes en la Unidad de Cuidados Críticos del CHUP”.

Cifras de 2024

Esta Oficina de Coordinación de Trasplantes del área Sanitaria de Pontevedra y O Salnés gestionó durante 2024 la donación de un total de nueve órganos -dos pulmones, un hígado y seis riñones- y dos córneas registrados en el Complejo Hospitalario Universitario de Pontevedra.

Durante este último año, el Área Sanitaria detectó tres donantes reales, de un total de cinco donantes potenciales en muerte cerebral, gracias a los cuales se alcanzó la gestión de la donación de estos órganos y tejidos.

El balance del pasado 2024 reveló, asimismo, que se dio una única negativa familiar a la donación de órganos y ninguna contraindicación médica por causas clínicas y metabólicas.

En este sentido, el doctor Martínez Melgar ha señalado que alrededor del 90% de los donantes del área sanitaria pontevedresa son mayores de 75 años, y que, en el caso concreto de las cifras del año pasado, ninguno pudo serlo de órganos torácicos.

Detección de posibles casos

Esta Oficina de Coordinación de Trasplantes del área Sanitaria de Pontevedra y O Salnés es también el departamento encargado de detectar aquellos posibles casos de pacientes cuya evolución clínica es susceptible de derivar en una muerte cerebral, circunstancia que los postularía como candidatos a efectuar una donación. También aquellos pacientes sobre los que se decide limitar las medidas de tratamiento de soporte vital y son potenciales donantes.

Tras la realización de un estudio idóneo, caso por caso, la Oficina de Coordinación de Trasplantes del área Sanitaria actúa como enlace con la Organización Nacional de Trasplantes e inicia los procedimientos necesarios para coordinar a todos y cada uno de los servicios del hospital que intervienen en el proceso de extracción.