Nuevo susto en el Halo de Vigo

El Halo se ha convertido en Vigo en una obra tan emblemática como conflictiva. Al menos, hasta la fecha, donde tras quince días de funcionamiento se suceden las polémicas. La última, en la tarde noche de ayer, cuando nueve personas se quedaban atrapadas en el interior de uno de los ascensores a 25 metros de altura.

El suceso, aparentemente asumible en una infraestructura de este tipo, se complicó aún más cuando los encerrados pulsaron el botó de emergencia sin obtener respuesta. Una falta de comunicación que les obligó a llamar al 112 Galicia donde, esta vez sí, atendieron su señal de alarma dando aviso a la Policía Local, a Protección Civil y a los bomberos de Vigo, que al final no tuvieron que intervenir.

Durante este tiempo, las nueve personas atrapadas -seis adultos y tres niños-, no necesitaron de ningún tipo de asistencia médica. La Policía Local achacaba a una avería el fallo, que provocó una parada momentánea del ascensor. En el otro, se produjeron colas durante el suceso.

Al parecer, un error en el sistema informático hizo que se parase este elevador, que acabó el trayecto cuando el servicio de mantenimiento reactivó la máquina.

El Halo fue estrenado, que no inaugurado al coincidir en plena campaña electoral, el pasado 16 de febrero. Se trata de una infraestructura futurista que completa el complejo comercial Vialia, ubicado justo por encima, y que permite salvar 50 metros de desnivel en menos de medio minuto. La alternativa, un recorrido a pie de casi dos kilómetros por céntricas calles de la urbe.

Sin embargo, la polémica rodea su puesta en funcionamiento. Así, y a la espera de que el alcalde socialista Abel Caballero fije fecha y hora para uno de sus grandes actos de inauguración, el ascensor ha levantado ya polvareda por su coste, disparado de 7,2 a 15,8 millones, y por su seguridad.

No en vano, dos jóvenes perdieron la vida estas semanas tras caer desde la terraza que corona la infraestructura, en lo que podrían ser sendos suicidios cuyas circunstancias están siendo analizadas por la Policía Nacional y que podrían conducir a la adopción de nuevas medidas. “Una vez dictaminadas las causas de este suceso, serán los técnicos municipales los que evalúen la situación y determinen la línea a seguir”, apuntaba el ayuntamiento tras la última muerte.