La Ribeira Sacra encara el tramo final para convertirse en Patrimonio Mundial de la Unesco

La candidatura de la Ribeira Sacra a Patrimonio Mundial entra en su fase definitiva. Así lo anunció este jueves el conselleiro de Cultura, Lingua e Xuventude, José López Campos, durante una reunión celebrada en el municipio ourensano de A Peroxa con alcaldes y representantes sociales y culturales del territorio.

La visita de los consultores de la Unesco está prevista para octubre y se considera un paso crucial en el proceso que concluirá en junio de 2026, cuando el Comité Mundial de la Unesco decidirá si concede este prestigioso reconocimiento.

"Estamos convencidos del valor de este territorio y confiamos plenamente en que obtendrá el merecido reconocimiento", afirmó López Campos, trasladando a los asistentes las "buenas sensaciones" que acompañan la candidatura.

Según explicó, Galicia ha cumplido de forma rigurosa todos los trámites y exigencias documentales requeridos por el organismo internacional, lo que permite afrontar esta recta final con garantías.

La propuesta, bajo el lema Ribeira Sacra: Paisaje del agua, defiende el valor universal y excepcional de este territorio que se extiende por 26 municipios de las provincias de Lugo y Ourense. El expediente incide en la singularidad del paisaje modelado por el agua: los cañones y valles fluviales del Sil y del Miño, su patrimonio hidráulico heredado de la Edad Media, con molinos, canales, centrales y saltos de agua que siguen en uso o conservados hasta hoy.

"Es un paisaje construido con el uso del agua de una manera novedosa, que no está suficientemente representada en la Lista de Patrimonio Mundial", destacó el conselleiro.

Desde el inicio del proceso en 2017, la Xunta de Galicia ha invertido cerca de ocho millones de euros en la conservación y puesta en valor de más de cuarenta bienes patrimoniales repartidos por la Ribeira Sacra.

En total, se han llevado a cabo más de 90 intervenciones, tanto de carácter arquitectónico como arqueológico, que han incluido iglesias, monasterios, museos, castros y yacimientos romanos.

"Con el esfuerzo y trabajo de todos, la Ribeira Sacra es hoy un territorio más vivo, más cuidado y más reconocido", concluyó López Campos, convencido de que en 2026 podrá celebrarse un hito histórico para Galicia.