Actos vandálicos

El vandalismo ensucia el fin del Camino en Compostela

La aparición de pintadas con rotulador permanente en puntos emblemáticos de la capital gallega pone en alerta a vecinos y Ayuntamiento

Unos peregrinos dejaron escrito “aquí terminamos el Camino de Santiago y empezamos el nuestro” en plena Plaza del Obradoiro.
Unos peregrinos dejaron escrito “aquí terminamos el Camino de Santiago y empezamos el nuestro” en plena Plaza del Obradoiro. Redes sociales

Pasan las semanas y se suceden los actos vandálicos en símbolos y monumentos de Compostela, punto final de ese Camino que, por lo visto, algunos se empeñan en recorrer… dejando huella. Aunque esta no sea la más adecuada.

La última, Mailena, que como reconoce la propia protagonista, “estuvo aquí” (was here). ¿Y dónde es aquí? Frente a la Catedral Santiago, en una de las fachadas del Coleigo de San Xerome, sede del rectorado desde donde se encara la recta hacia Fonseca.

Ese fue el lugar elegido, esta vez, para dejar esa falsa huella en el final del Camino, en una ciudad declarada en 1985 Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco, y que este verano está siendo víctima de numerosos actos vandálicos de turistas o visitantes que dejan pintadas en piedras y pavimentos que, más tarde, se hacen virales en redes sociales.

Última pintada aparecida en Santiago.
Última pintada aparecida en Santiago. Alex Sampayo

Tal es el caso, por ejemplo, también, de una de las que más notoriedad han alcanzado en este período estival. A mediados del mes de julio, en la emblemática Plaza del Obradoiro, a los pies de la catedral, unos caminantes dejaron escrito en rotulador permanente el mensaje “aquí terminamos el Camino de Santiago y empezamos el nuestro”, junto al nombre de los tres peregrinos.

Tras ello, en la Fuente de los Caballos, en la Plaza de Platería, también con rotulador permanente se escribió un contundente: “A y G se bañaron aquí”.

Apelar a la concienciación

Ante esta situación, la responsable de Turismo del Ayuntamiento, Míriam Louzao, apela a la concienciación tanto de los vecinos como de los visitantes sobre la importancia de respetar el patrimonio “de un Ayuntamiento como es Santiago, Patrimonio de la Humanidad”.

La concejala señala que desde el gobierno local buscan apelar a esto "a través de la información" y con ese fin han impulsado la campaña 'Fráxil' (Frágil) porque consideran que “la pedagogía es la mejor manera de conservar el patrimonio y ponerlo en valor”.

Para ello, el Ayuntamiento desplegará durante los meses de agosto y septiembre informadores en las calles y repartirá 8.000 trípticos y 500 carteles con mensajes de concienciación en zonas de afluencia de turistas y peregrinos, así como en municipios limítrofes por los que pasan los Camino de Santiago.

Las autoridades locales no descartan recurrir a las sanciones si se continúa dañando el patrimonio de la ciudad.