Gastronomía

Antes de las once, los tacos y el gin tonic saben mejor

Ante las restricciones, sólo debemos reservar un poco antes para cenar en Aüakt

Restaurante AUKT en Barquillo 44.
Restaurante AUKT en Barquillo 44.©Gonzalo Pérez MataLa Razón.

Cuidado, porque este establecimiento de nombre Aüakt, léase aguacate, gusta tanto al apasionado de la fruta como al que no lo es tanto. Porque, nos cuenta Pago Larena, socio fundador del estudio Madrid In Love y propietario del local, que su filosofía se basa en él como un estilo de vida. Es decir, «a su alrededor ha surgido un movimiento en el que éste es el símbolo en el que se asienta la salud como bienestar y consideramos que el nuestro es un espacio que lo potencia», dice, al tiempo que quiere hacer entender a quien aún no lo tenga claro aún que la comida «healthy» no es insípida y mucho menos aburrida. Quien crea que debe conformarse con platos que jamás pediría si no fuera porque busca cuidarse es que no tiene ni idea.

Aüakt se encuentra en la calle Barquillo, en pleno barrio de las Salesas, el mismo que sólo hace unos meses era un hervidero de gentío, ya sea de compras o con unas entradas en mano para un espectáculo o al cine, y ahora poco se parece a lo que era. De ahí que hayan ocupado algunas de sus mesas numerosas actrices, entre ellas, Loles León y Macarena Gómez. ¿Qué pedir? Unos muy logrados tacos de pollo pad thai con guacamole, el sanísimo y sabroso canelón de calabacín con boniato y berenjena con tomate seco y queso de cabra y el asado de tira, hecho a baja temperatura durante doce horas. con patata asada, que es uno de los platos más de mandados y nos encantó, lo mismo que la berenjena asada con pesto, mozzarella y rayadura de corazón de atún. Bocados para disfrutar en horario ininterrumpido, así que sólo es cuestión de apagar el ordenador y volver a los restaurantes hasta las once de la noche. Porque aquí, los buenos tragos se elaboran sin azúcar refinado y con siropes y mieles de agave, como el «Pornstar», con vodka, agave, vainilla, lima, fruta de la pasión y un «shot» de cava. Hasta la tónica Le Tribute del gin tonic es natural. Por eso, siempre cae el segundo.