Sl

¿Cuáles son los alimentos que debes evitar recalentar más de una vez?

Es necesario conocer los riesgos para poder disfrutar de las sobras de comidas de manera más segura y saludable

Un bol de arroz blanco
Un bol de arroz blancoPixabay

La práctica de recalentar sobras de comida es común en muchos hogares, una manera de aprovechar lo que queda y reducir el desperdicio alimentario. Sin embargo, no todos los alimentos toleranesta práctica de la misma manera. Algunas precauciones son esenciales al recalentar, como consumir las sobras en un plazo de cuatro días, asegurarse de alcanzar una temperatura de al menos 70 grados Celsius durante dos minutos para eliminar gérmenes, y descongelar previamente las sobras congeladas en la nevera. Aunque la mayoría de los platos pueden recalentarse, hay algunos alimentos que es mejor evitar volver a calentar.

Pollo

A pesar de ser una opción de consumo frecuente, requiere cuidado en su manipulación, ya que es propenso a la contaminación. Recalentarlo puede cambiar la composición de sus proteínas, dando lugar a problemas digestivos.

Arroz

Recalentar arroz no suele presentar problemas, pero hacerlo más de una vez puede contener cierto riesgo. Es crucial que al consumirlo esté bien caliente, ya que a temperatura ambiente, las bacterias tienden a multiplicarse.

Espinacas

Recalentar espinacas y otras verduras de hoja verde, ricas en nitratos, puede ser peligroso. A altas temperaturas, estos nitratos pueden convertirse en nitritos, sustancias perjudiciales y potencialmente cancerígenas. El consumo de espinacas recalentadas puede provocar diarreas y vómitos si los niveles de nitritos aumentan.

Setas o champiñones

Los hongos sufren modificaciones al recalentarse, perdiendo agua, fibra y su distintivo sabor. Se recomienda consumirlos en frío en lugar de volver a recalentarlos, ya que su naturaleza propicia la acumulación de bacterias.

Patatas

Aunque es común recalentar patatas, es importante tener en cuenta que, además de alterar su sabor, este proceso puede atraer bacterias si no se calientan lo suficiente. Es fundamental garantizar una temperatura adecuada al recalentarlas, especialmente si se almacenan en el frigorífico.