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La teoría física que explica el tatuaje sentimental de Mireia Varela, ex de Gabriel Rufián
La filóloga comparte en Instagram su nuevo tatuaje de la “teoría de Dirac”, una ecuación matemática con mucho significado sentimental
Mireia Varela, ex pareja de Gabriel Rufián, vuelve a mostrar en redes sociales las cenizas de su amor con el político. Lejos de pasar página tras el divorcio, la catalana ha decidido tatuarse la teoría de Dirac en la piel, concretamente, debajo del pecho. Se trata de una línea que rodea la parte baja del seno en la que discurren diferentes dibujos: desde puntos, planetas, estrellas y flechas, hasta la ecuación matemática que representa esta teoría.
Un tatuaje que lleva un gran mensaje escondido y que la propia protagonista trata de explicar en Instagram: “La teoría de Dirac proclama que si dos sistemas interactúan durante un cierto período de tiempo y luego se separan, se podrá describir como sistemas separados, pero, de algún modo, guardan una estrecha relación. A pesar de la distancia, su conexión será instantánea. Es lo que se conoce como fenómeno del entrelazamiento cuántico o conexión cuántica”. La publicación ha recibido numerosos comentarios que animan a la filóloga a seguir adelante y olvidarse, de una vez por todas, de su ruptura con el portavoz de ERC. Algunos incluso tachan este despecho de obsesión y califican a Mireia de “alma en pena”. Pero no es la primera vez que abre su corazón en las redes sociales, porque es habitual ver a la filóloga hispánica mostrar sus pensamientos y reflexiones más profundas sobre su relación “no acabada” con el político.
¿Qué significa realmente la ‘Teoría de Dirac’?
¿Es la de Dirac la ecuación más bella de la historia? Muchos físicos dirán que sí. Aunque en la piel de Mireia está incompleta. Falta un detalle tan sutil como un cero. “Igual a cero” (=0) debería terminar. Pero le perdonaremos el lapsus.A finales de los años 20 la ciencia vivía convulsionada por las nuevas posibilidades de la física cuántica. Popes como Schrödinger habían enseñado que la vieja física mecánica (la que explicaba el universo desde tiempos de Newton) no era suficiente para dar razón de las cosas que ocurren en el espacio de lo más pequeño (el de las partículas subatómicas). Ahí dentro pasan cosas que no se explican con las leyes de Newton. Pero esas cosas que pasan tampoco funcionan igual en cualquier estado. Las leyes de Schrödinger necesitaban afinarse aún más para tener sentido en el nuevo escenario relativista dibujado por Einstein. Schrödinger describió el comportamiento de los objetos muy pequeños (los electrones, por ejemplo) y Einstein el comportamiento de los muy veloces (los cuerpos que viajan a velocidad de la luz). Faltaba una ecuación que uniera las dos propuestas y explicara el comportamiento de los objetos muy pequeños que, además, se mueven muy deprisa. Por ejemplo, los electrones cuando viajan a la velocidad de la luz. Para un físico, la ecuación de Dirac no es otra cosa que la versión relativista de la ecuación de ondas de la mecánica cuántica. Poco romántico. Para un enamorado o enamorada, puede ser algo más. Porque la ecuación sirvió para demostrar la existencia de la antimateria y el entrelazamiento cuántico. Sin ella no sabríamos que toda partícula en el cosmos tiene su antipartícula, su “yo” negativo, y que cuando ambas se encuentran, se destruyen. Ni que dos partículas que han estado en contacto siguen influyéndose una a otra hasta el infinito aunque se separen a millones de años luz de distancia: todo lo que le ocurra a una, tendrá reflejo en la otra. Una especie de “hasta que la muerte nos separe” con signos matemáticos. Aunque se olvide poner “igual a cero”.
Muy activa en redes
En 2018, Gabriel Rufián y Mireia Varela pusieron punto y final a su relación tras años de amor y un hijo en común. Ambos se conocieron en el metro, donde coincidían casi a diario, y el feeling era visible, hasta que, un buen día, Rufián se atrevió a darle su número de teléfono. De esta manera comenzó la larga historia de amor entre ambos que duró hasta hace aproximadamente un año, cuando decidieron divorciarse.
El 31 de diciembre de 2019, Varela publicó en su Instagram un texto que decía: “Me doy cuenta de que me faltas…”, una declaración que dejaba claro que la relación entre ambos estaba terminada.
Pero lejos de seguir adelante con su vida, el 1 de enero, tras hacerse pública la relación entre su ex pareja y la periodista Marta Pagola, compartió un nuevo y durísimo texto: “He despedido 2019 llorando sabiendo que ya no podré recuperarle. Lloro en este 2020 por perder al amor de mi vida (...) La vida son batallas; a veces hay que luchar y otras hay que saber rendirse. Y yo me rindo”.
Días más tarde, los rumores sobre una supuesta boda entre Rufián y Pagola hizo estallar de nuevo a Mireia, pero esta vez a modo de advertencia a la nueva pareja de él. Así, publicó en las redes sociales su lista de reproducción de Spotify, titulada “Desamor”, junto a la canción ‘A ella’ de la cantante Karol G y el siguiente mensaje: “Que si fue así conmigo...”. Sin duda, una advertencia que iba directa a la pareja de Rufián, ya que este tema de reguetón dice: “Hoy quiero decirle a ella que si fue así conmigo, también lo será con ella”.
Marta Pagola, la nueva pareja de Rufián
La vida personal de Gabriel Rufián se había mantenido siempre en un segundo plano hasta ahora. El activista dio su salto a la política en 2015, cuando se sumó a la Asamblea Nacional Catalana y, posteriormente, el 30 de octubre de ese mismo año, fue elegido para encabezar la lista de ERC por Barcelona en las elecciones legislativas del 20 de diciembre. Actualmente es el portavoz adjunto del grupo de Esquerra Republicana en el Congreso, y uno de los políticos más criticados por sus actos en la bancada. Pero Rufián no solo ha saltado a la palestra por su faceta política, su vida sentimental ha sido recientemente puesta en el foco mediático tras los rumores de una posible boda con su nueva pareja, la jefa de prensa del PNV Marta Pagola, una navarra de 37 años. Al parecer, el amor entre Gabriel Rufián y Pagola habría podido surgir en los pasillos del Congreso de los Diputados hace aproximádamente un año. Si todo marcha tan bien como hasta ahora, quizá decidan dar un paso adelante en su relación y en los próximos meses, darse el “sí quiero” en Hondarribia (Guipúzcoa). Una noticia que cuando saltó a los medios fue desmentida por los protagonistas pocos días después.
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