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Corinna podría escribir un libro: “Dejad que los reyes se acerquen a mí”

El fiscal suizo que la investiga señala ahora que, además de las donaciones del Emérito, está el terrenito en Marrakech que le regaló el rey de Marruecos

Corinna vuelve a la carga con una explosiva entrevista sobre el Rey Juan Carlos en la BBC
Corinna Larsen mantiene su demanda contra el Rey EméritolarazonEUROPA PRESS

No se sabe si la BBC la va a hacer fija o si por lo mucho que canta va a representar al Reino Unido en Eurovisión, pero cuentan que una editorial española ha propuesto a Corinna escribir un libro: «Dejad que los reyes se acerquen a mí». Subtítulo, «Regalos reales e irreales». El fiscal suizo que la investiga señala ahora que, además de las donaciones del Emérito, está el terrenito en Marrakech que le regaló el rey de Marruecos. Dicen las lenguas viperinas que no quiso aceptar nada de Putin (más que un rey) por si se trataba de un regalo envenenado, pero aún desconocemos lo que le pudo caer en los Emiratos Árabes: con tanto príncipe, madre, como hay por allá, es raro que una rubia aparente y princesa se vaya sin un par de camellos cargados de joyas de Cartier o así.

Por cierto, la que se ha armado en las redes por el reportaje de Irene Montero en «Diez Minutos». Que si lucía un rolex o un swatch «la Preysler comunista de Galapagar», «la Pantoja de Galapagar» o «la princesa de Galapagar», que de todo la han llamado. No sé si estamos a rolex o a setas, pero creo que ya es hora de decir que el ayuntamiento de esa localidad debería conceder de una vez a los Iglesias (Irene y Pablo, tanto monta, monta tanto) el título de hijos adoptivos y ciudadanos ilustres de Galapagar, sobre todo ahora que se acercan las fiestas de su patrón, el Cristo de las Mercedes, del que tanto Pablo como Irene son devotos desde que les contaron que también es el patrón de los manifestantes pancarteros: le rezan para que no cesen los escraches, porfa, y así alcanzar la gloria de la víctima propiciatoria que como buenos creyentes de la fe comunista merecen. Además, contribuyen a los gastos de la parroquia con donativos al Cepillo B.

El actor Lluis Homar, director de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, es devoto de San Juan de la Cruz y confiesa humildemente que tan sólo aspira «a ser quien soy». Y añade: «Aspiro a ser un perdedor, un ’‘loser’' material». Cree que así alcanzará «la muerte del ego parta entrar en otra dimensión». Avise si por casualidad encuentra por ahí a Sánchez. O a Corinna.