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Los Falcó, los marqueses que se hicieron famosos por las traiciones de sus esposas, Marta Chávarri e Isabel Preysler
Vidas paralelas. Al igual que su hermano Carlos, la vida de Fernando Falcó estuvo marcada por un escándalo que provocaría una auténtica conmoción en la información económica y social española
La muerte del Marqués de Cubas, Fernando Falcó, siete meses después de la de su hermano Carlos, Marqués de Griñón, viste de luto las raíces de una familia aristocrática que, pese a su clase y discreción, acabó siendo portada de las revistas del corazón por sus involuntarios escándalos al ser traicionados por sus mujeres a los ojos de España.
Carlos y Fernando, hijos del duque de Montellano y la condesa de Santa Isabel, rezumaban Grandeza de España por sus venas. Criados junto al entonces Príncipe Juan Carlos en las Jarillas, una finca propiedad de su familia y cercana a la capital, en la que 8 jóvenes pertenecientes a las familias más importantes de España fueron escogidos por Franco para compartir educación y pupitre con el elegido para sucederle a título de Rey.
Ricos y atractivos, simpáticos y muy bien relacionados, los hermanos Falcó lo tenían todo para cautivar a las mujeres más atractivas y deseadas. Pertenecían a la élite y pronto fueron considerados los solteros de oro de la nueva España que nació tras la muerte del dictador. Aunque su lista de conquistas fue interminable, ninguno tuvo demasiada suerte en el amor.
Mientras Carlos se casó en cuatro ocasiones, Fernando sólo pasó por la vicaría en dos ocasiones. Su primera esposa, Marta Chávarri, acabaría convirtiéndose en la mujer más famosa de España desbancando incluso del ranking a la que fue su cuñada, Isabel Preysler, segunda esposa del Marqués de Griñón. Marta, a diferencia de Isabel, tenía sangre azul y como ella, predilección por hombres influyentes y bien situados.
Marta Chávarri, la mujer que le dio un hijo y un sinfín de dolores de cabeza
Nacida en 1960, Marta era hija del diplomático Tomás Chávarri y de Matilde Figueroa, hija del Marqués de Santo Floro. Creció, debido a la profesión de su padre, viajando por el mundo en países como Suiza o Estados Unidos. Cuando tenía 17 años se instaló en Madrid y comenzó a codearse con los cachorros de la jet madrileña, a la que pertenecía por cuna. Entabló una amistad íntima con el marqués de Cubas de manera casual, cuando recién cumplidos los 18 años, le pidió ayuda para convalidar su permiso de conducir americano en España. Él presidía el Real Club del Automóvil y tenía 21 años más que él. Apenas un año después de aquel encuentro, en junio de 1982, se casaban por todo lo alto en la catedral de Plasencia ocupando la portada de ¡Hola!.
Fue su boda la que permitiría a Marta comenzar a trabajar junto a Rafael Ansón entrevistando a famosos en La Revista,la publicación que el Grupo Zeta lanzó para competir con ¡Hola! y que dirigía Jaime Peñafiel. De aquella unión, nacería Álvaro, el único hijo que tuvo el marqués. Pero la diferencia de edad de la pareja acabaría haciendo estragos en el matrimonio. La bella Marta sólo pensaba en salir y divertirse mientras que el marqués, entrado en la cuarentena, deseaba una vida más hogareña y familiar. A principios de1988 fue coronada Lady España, un título con el que se premiaba a mujeres con relevancia social y tirón en las revistas del corazón. Sustituía en el galardón ni más ni menos que a la Duquesa de Alba y rivalizaba en portadas con Isabel Preysler, ya casada con Miguel Boyer, tras separase, en 1982, de Carlos Falcó.
Pero no sería hasta 1989 cuando Marta alcanzaría la cima mediática con unas fotos bomba que acabarían con su matrimonio con Fernado Falcó. El 22 de enero de 1989, Marta era fotografiada en una escapada a Viena junto al marido de Alicia Koplowitz, Alberto Cortina. El escándalo sacudiría al Ibex y pondría en una complicada situación a los amantes, que seguirían adelante con aquella aventura extra conyugal.
Dos semanas después de las fotos publicadas en Diez Minutos, Fernando y Marta se separaban de mutuo acuerdo y era el marqués quién se quedaba con la custodia de su único hijo. Por su parte, Alicia Koplowitz destituía en marzo de 1989 al frente de FFCC a su esposo, a quién sustituía en la presidencia su cuñado, el marido de su hermana Esther, Alberto Alcocer.
Si los hermanos Falcó representaban la quintaesencia de la aristocracia, los Albertos, primos y ex cuñados por sus matrimonios con las Koplowittz, eran los máximos exponentes de la beautiful people, un nuevo estamento social formado a golpe de “pelotazos”. los hermanos Falcó, tristemente famosos por las deslealtades de sus mujeres, Marta Chávarri e Isabel Preysler
Curiosamente, 13 años después de aquel escándalo que conmocionó a España y acabó con la confianza del marqués de cubas en el amor, Fernando acabaría casándose con Esther Koplowitz, el otro 50 % de FFCC. Pero esta es otra historia que merece un capítulo aparte de la interesante vida de Fernando Falcó, un hombre sobresaliente en la vida social española.
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