Casa Real

Felipe VI llama al orden a sus polémicos sobrinos

Las salidas con amigos de Froilán y Victoria Federica no favorecen la imagen de la familia

SAN LORENZO DEL ESCORIAL, 27/10/2020.- El rey Felipe a su llegada a la reunión del capítulo de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo, hoy en el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial. EFE/ Zipi
SAN LORENZO DEL ESCORIAL, 27/10/2020.- El rey Felipe a su llegada a la reunión del capítulo de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo, hoy en el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial. EFE/ ZipiZipiEFE

Fuente de toda credibilidad del palacio de La Zarzuela. No extraña. Lo que me cuenta era de esperar. El Rey Felipe VI, el tío de los polémicos Froilán y Victoria, Pipe y Vic para los íntimos, hace una llamada de «urgencia» a su hermana, la infanta Elena, para que ponga orden en casa y llame la atención a sus dos hijos.

Los sobrinisimos hacen flaco favor a la Monarquía con los episodios fuera de tono que protagonizan cada dos por tres durante este duro tiempo de pandemia. Se saltan las normas sanitarias, pasean sin mascarilla, se van de botellón... Y las críticas de los medios de comunicación molestan, y mucho, a su augusto tío .

También a la Reina consorte, Letizia, que, según las malas lenguas, no tiene una buena relación con sus cuñadas, Elena y Cristina, ni tampoco con su suegra, la Reina Sofía.

Al Monarca, los desafueros familiares le duelen en el alma, le dejan entre la espada y la pared, y a veces se ve impotente para mediar entre las dos partes.

Felipe es un rey moderno y sin anclajes en el pasado, nada retrógrado, todo lo contrario, pero las normas sanitarias son para todos, sean ricos o pobres, populares o anónimos, y en este aspecto sus sobrinos no deben ser una excepción.

Elena opina igual que su hermano y ya ha llamado al orden a sus hijos, igual que hizo en su momento su ex marido, Jaime de Marichalar, pero –y no creo que tengan problemas auditivos– Vic y Pipe siguen yendo a su bola, por libre, sin darse cuenta de que, por su posición social, tienen que ser más un ejemplo social que ofrecer una imagen de lo que no debe hacerse. En este sentido, nuestro Rey se muestra intransigente con la actitud de sus sobrinos.