Polémica

Rociíto lava la imagen de su marido Fidel en el documental

En los episodios 4 y 5 tocará también temas como el de la adopción de sus hermanos, Gloria Camila y José Fernando

Rocio Carrasco, protagonista de la docuserie "Rocío: contar la verdad para seguir viva"
Rocio Carrasco, protagonista de la docuserie "Rocío: contar la verdad para seguir viva"Jesus BrionesGTRES

El próximo domingo conoceremos profundamente la versión que a Rocío Carrascole interesa dar a conocer de su marido Fidel Albiac, la parte más amable del hoy abogado, todo elogios al hombre que, ella confiesa, le devolvió el amor y la alegría cuando su matrimonio con Antonio David Flores había naufragado. Será en un nuevo episodio del documental, algunos lo denominan “docudrama”, “Rocío. Contar la verdad para seguir viva”, y se supone que tan solo referirá los momentos felices, “olvidando” los infelices. Eso si, recordará aquel accidente de carretera que casi les cuesta la vida a ambos.Las malas lenguas aseguran que la intención de Rocío es cambiar la imagen tan cuestionada de su marido, transformándola en la de un ser que le cambió la vida para bien. Así pues, la hija de Rocío Jurado revelará cómo se conocieron, su apoyo en el polémico proceso de divorcio con el ex guardia civil, los primeros momentos de su relación sentimental...

En los episodios 4 y 5 de la entrega semanal de un documental que está levantando ampollas familiares, Rociíto tocará también temas como el de la adopción de sus hermanos, Gloria Camila y José Fernando, el extraño robo de una caja fuerte propiedad de la Jurado en su casa madrileña de La Moraleja, la demanda de Flores contra su ex suegra cantante por las declaraciones que hizo en su contra en un programa de la televisión Argentina, la sentencia de divorcio... El cuatro lleva por título “Muera el amor” y el quinto “A que no te vas”. Los episodios abarcan desde julio de 1999 a enero del 2001. Y volviendo al robo de la caja de caudales, Rocío cree que fue una persona muy cercana quien lo perpetró. Tiempo después, unas comprometedoras cartas se intentaban vender en la redacción de una revista del corazón.