Raquel Mosquera ingresada por un brote psicótico tras su rifirrafe con Rocío Carrasco

El drama vuelve a la marcar a esta familia. Raquel Mosquera, la que fue mujer de Pedro Carrasco, ingresó a las 0,10 del día 13 de abril por un supuesto brote psicótico, según ha podido saber LA RAZÓN. Su pareja sentimental, Isi, la acompañó al Hospital Puerta de Hierro de Madrid abrumado y sobrepasado por la agobiante situación. No pudo más, aunque Raquel Mosquera, fuera de sí y no siendo consciente de la situación, se negaba a cualquier alternativa para sobrellevarla. Isi, bien asesorado por la familia de Raquel, consiguió que ésta entrase en el coche para ir al hospital. Antes tuvieron que aguantar unos eternos minutos hasta que llegase un familiar de Raquel para que se quedase al cuidado y resguardo de los hijos de la peluquera.

La viuda de Pedro Carrasco no ha soportado la presión de la actualidad, que ella percibe y entiende como una ofensa.

Hay que recordar que Raquel ha negado la versión de Rocío Carrasco sobre la relación con su padre y el supuesto perdón hacia sí misma y hacia Fidel Albiac. Su versión de los hechos difiere radicalmente con lo expuesto por la hija de Pedro Carrasco. Raquel tiene muchos defectos, pero la sinceridad le ha jugado malas pasadas. El capítulo dedicado a la relación entre Rocío Carrasco y su padre, hizo reverdecer la angustiosa relación entre padre e hija de la que Raquel fue testigo.

Raquel es una mujer enferma, delicada y extremadamente sensible… La situación la ha superado y ha abierto la Caja de Pandora de lo que le ocurrió hace años. Los facultativos que la han atendido han decidido que Raquel debía permanecer en observación hasta que estuviese mejor. Raquel sigue ingresada en el Hospital Puerta de Hierro bajo el cuidado de los especialistas. Isi no ha salido del hospital, siempre al cuidado de su pareja de la que no se despega. Igualmente, Isi también tuvo que ser atendido por una crisis de ansiedad por la extrema situación. Raquel quedará ingresada en el centro médico y será derivada, como es lógico, al equipo que ha llevado su trastorno afectivo bipolar que tantos problemas le dio.