Linchamiento

Rocío Flores no puede más

La serie documental de su madre ha hecho mella en su estado anímico.

‘Rocío, contar la verdad para seguir viva’, ha llegado a su fin. Tras trece episodios de durísimas declaraciones, la hija de ‘la más grande’ se toma un respiro hasta el próximo otoño, cuando se estrenará la segunda temporada del reportaje: ‘En el nombre de Rocío’. Sin embargo, las reacciones a la serie documental no han hecho más que empezar y se avecinan unos meses muy complicados para toda la familia, especialmente en el caso de Rocío Flores. La nieta de la Jurado ha sido arrastrada al foco de la polémica a consecuencia de las acusaciones que su madre ha vertido sobre ella, y desde que aquel fatídico capítulo vio la luz en Telecinco, la joven no ha vuelto a ser la misma.

La naturalidad y espontaneidad que transmitía en sus anteriores intervenciones en la pequeña pantalla se han esfumado para dar paso a un constante estado de alerta. Rocío Flores mide todas y cada una de sus palabras y no da lugar a ningún comentario que pueda malinterpretarse o utilizarse en su contra en los medios de comunicación. Acostumbrada a que se manipulen sus palabras para dibujarla como una chica conflictiva, la joven ha tomado la decisión de guardar un silencio sepulcral. Ni siquiera se pronuncia sobre los asuntos más cotidianos de su día a día.

Rocío Flores con un amigo en Madrid
Rocío Flores con un amigo en MadridDaniel GonzalezGTRES

Con la habitual simpatía y amabilidad que Rocío Flores siempre muestra ante la prensa, la nieta de la Jurado declina incluso responder a preguntas relacionadas con su futuro profesional o su exitosa presencia en las redes sociales, donde acumula mas de 750.000 seguidores. Su silencio no es voluntario, sino que se ha visto forzada a callar para evitar que sus palabras vuelvan a enrevesarse para buscarle un significado inexistente relacionado con su madre.

Por más veces que aclare o matice sus declaraciones en ‘El programa de Ana Rosa’, buena parte de la opinión pública siempre encuentra algo a lo que sacar punta contra ella y el resto del clan Flores. Rocío no puede más, y así lo ha demostrado en el concierto de Pitingo, íntimo amigo de su padre, en el madrileño Teatro de La Estación de Príncipe Pío. La joven se ha presentado en el espectáculo acompañada por varios amigos, y, aunque amable y atenta con los medios de comunicación que allí se dieron cita, ha mostrado una vez más su hermetismo a la hora de afrontar determinados asuntos familiares. Ella tampoco está preparada.