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Guerra entre los royal británicos y la prensa: los duques de Cambridge vetan a la BBC

El príncipe Guillermo y Kate Middleton vetan a la cadena pública en un acto navideño

Los duques de Cambridge
Los duques de CambridgeDPA vía Europa PressDPA vía Europa Press

La relación entre la Monarquía británica y la prensa siempre ha sido de amor-odio. Es un «ni contigo, ni sin ti». Como todas las relaciones tienen sus altos y bajos. Pero en el Reino Unido no se recuerda un crisis como la que se vive estos días.El príncipe Guillermo ha vetado a la BBC en un acto. Y eso son palabras mayores: El heredero al trono vetando a la cadena pública del país. Inaudito.

Desde hace tiempo se venía hablando del primer gran acto navideño que protagonizarán los duques de Cambridge el próximo mes de diciembre. Kate será, por primera vez, la anfitriona de un concierto de villancicos en la abadía de Westminster con fines benéficos y entre el público se esperan que estén su marido junto con sus tres hijos. Se trata de un momento importante. Es la propia BBC Studios -el departamento de la cadena pública que se encarga de la parte musical- quien precisamente está detrás de la organización. Pero llegado el día, la retransmisión no estará a cargo de las cámaras de la BBC, sino las de ITV, cadena privada.

Según revelaba una fuente al periódico «The Sun»: «Este es un verdadero ‘hit’ para ITV. Es un formato completamente nuevo: la realeza nunca antes había presentado un concierto televisado y tener a la duquesa a la cabeza es un gran atractivo. Naturalmente, la mayor parte de la programación real va automáticamente a la BBC como emisora nacional. Pero ahora parece que trabajarán más con ITV en el futuro», deslizan.

El episodio se enmarca en la guerra abierta que mantiene Buckingham contra la cadena pública. Hasta ahora, habían sido los tabloides los que habían generado quebraderos de cabeza a los royals y la BBC, la plataforma seria donde emitían sus comunicados.

Sin embargo, el documental «Los príncipes y la prensa», cuyo primer capítulo se emitió el pasado lunes por la noche, ha supuesto un punto de inflexión. El espacio analiza la cobertura de los «jóvenes royals» desde los años 2012 a 2018, cuando Enrique y Meghan se comprometieron. Y explica además el pacto «no escrito» que siempre ha existido entre la Monarquía y los medios. «Consiste en dejarles vivir en sus palacios y obtener parte del dinero de los contribuyentes, a cambio de que permitan el acceso a la prensa, lo que supone un constante suministro de fotos e historias. Se les garantiza así una cobertura favorable que les permita renovar su contrato emocional con el pueblo», describe el conductor Amol Rajan, un periodista republicano, que ha definido a la Monarquía como algo «absurdo» y a los medios británicos como su «aparato de propaganda».

Kate Middleton y el príncipe William
Kate Middleton y el príncipe WilliamAlberto PezzaliAP

«Prensa libre, responsable»

El documental también hace autocrítica de los medios. Pero lo que no ha gustado a Buckingham es que no pudiera tener acceso al material antes de emitirse. Y el hecho de que en el segundo y último capítulo se vayan a tratar las tensiones entre los hermanos, agravadas por las filtraciones a los periodistas, que hacían supuestamente sus respectivos equipos, ha generado nerviosismo.

En este sentido, Buckingham (que representa Isabel II), Clarence House (príncipe Carlos y Camilla) y Kensington (Guillermo y Kate) han emitido un comunicado conjunto que la BBC reproduce íntegramente: «Una prensa libre, responsable y abierta es de vital importancia para una democracia sana. Sin embargo, demasiado a menudo, se presentan como hechos afirmaciones infladas y sin fundamento por parte de fuentes anónimas. Y resulta decepcionante cuando cualquiera, incluida la BBC, les otorga credibilidad», decía el comunicado.

Por otra parte, los tabloides han echado más leña al fuego asegurando que Meghan Markle sí tenía conocimiento previo del contenido. Y de ahí que aparezca su abogada Jenny Afia desmintiendo el supuesto acoso al que Meghan sometía a sus empleados. En este sentido, acusan a la BBC de ponerse del lado de Enrique en la particular guerra que éste mantiene con su familia.