Leonor y Sofía, la (bella) y discreta influencia

Como dos turistas jóvenes más paseando por Palma en una intensa y frenética mañana de compras. La Princesa Leonor y la Infanta Sofía fueron las protagonistas ayer de una nueva salida informal de la Familia Real en sus vacaciones en Mallorca. Cierto es que estuvieron junto a sus padres, Felipe VI y la Reina Letizia, pero esta vez sus progenitores sí permanecieron un poco más alejados dejando que las adolescentes de la casa pudieran acaparar todos los focos. Y vaya si lo hicieron: abrazos, gestos cómplices y muchas conversaciones durante los quince minutos que se dejaron fotografiar y donde demostraron que son hermanas, pero también mejores amigas.

Este paseo, previsto para la jornada del pasado martes pero que se decidió retrasar hasta ayer miércoles debido al jet lag que arrastraba el monarca tras su viaje a Colombia, donde asistió a la toma de posesión de Gustavo Petro como nuevo presidente, arrancaba en la céntrica calle palmesana de Jaume II y prosiguió por la calle Sindicato y la plaza Mayor. La Princesa y la Infanta iban a la búsqueda de unos zapatos, a juzgar por la elección de las tiendas que buscaban. Entraron en Ulanka pero no convenció nada de lo que había en su interior a las jóvenes; fue en Altrupiu donde la Infanta Sofía adquirió un par de sandalias «de marca española», según contó minutos después uno de los dependientes. También hubo tiempo de echar un vistazo a escaparates de joyerías: en uno de ellos, la Princesa Leonor le dijo a su hermana menor que ahí «vendían perlas», pero prefirieron seguir su paseo, donde se encontraron con numerosos locales y turistas sorprendidos ante tanta expectación mediática. Hubo tiempo también para los «selfies» y los aplausos, aunque aquí, utilizando un símil futbolístico, ganó por goleada la Reina Letizia, la más solicitada.

Era una mañana calurosa, como la de las últimas semanas en Mallorca, y por tal motivo, los looks escogidos para caminar fueron ligeros. La Princesa Leonor optó por rescatar de su fondo de armario un vestido veraniego de la pasada temporada de Mango, en color rosa y corte wrap, y alpargatas de Macarena Shoes, mientras que la Infanta Sofía estrenó un vestido de corte midi con estampado tropical y alpargatas de la misma firma que las de su hermana. La Reina volvió a presumir de piernas y bronceado gracias a un short de rayas en azul y blanco de la low cost Pimkie, y una blusa blanca de manga larga de Hugo Boss. De nuevo, sorprendió en su elección de zapatos, unas alpargatas blancas y planas de la misma marca que la blusa. El bolso volvió a ser de Feel Mallorca y ese tejido Ikat, tradicional de la isla, y que tanto ha promocionado durante sus vacaciones en la isla. El Rey, por su parte, también optó por un look casual, con unos pantalones cortos en color beis y polo en color azul celeste. Los cuatro, eso sí, coincidieron en un complemento: las gafas de sol.

El recorrido matinal, que arrancaba a las diez de la mañana cuando comenzaban a levantarse las persianas de algunos comercios, tenía también un componente cultural, pues los Reyes y sus hijas pudieron admirar durante unos breves minutos la reciente rehabilitación del edificio modernista Can Forteza-Rey. Se trata de un lugar de gran valor patrimonial que se comenzó a construir en 1907 y se finalizó en 1909. Precisamente en aquella época, el arquitecto Antoni Gaudí estaba en Palma encargándose de la rehabilitación de la Seu y en Can Forteza-Rey puede verse su influencia. Entre los medios locales se comentó que la visita a su interior merecía más minutos; quizás sea uno de los próximos lugares a los que la Familia Real dedique más tiempo en sus próximas vacaciones.

Si esta será la última ocasión en la que podamos ver en público juntas a Leonor y Sofía es difícil de predecir, aunque todo apunta a que, teniendo en cuenta que la Princesa de Asturias se incorporará a sus clases en el internado de Gales el próximo 26 de agosto, las hermanas podrían estar apurando sus últimos días juntas. Hasta octubre, cuando se entreguen los Premios Princesa de Asturias, no volverían a encontrarse. Un evento en el que ambas hermanas acapararán una vez más las portadas, nacionales e internacionales, con su bella y discreta influencia.