Meghan Markle, retratada: sus mentiras sobre los Windsor caen por su propio peso

Meghan Markle sigue decidida a terminar con la reputación de la familia real británica, y lo hace a base de declaraciones que ponen de manifiesto algunas situaciones incómodas que supuestamente tuvo que aguantar cuando se convirtió en la prometida del príncipe Harry. La duquesa de Sussex rompe con la discreción que se exige en las casas reales y en su última entrevista incluso aseguró que la relación de su esposo con su padre, el príncipe Carlos, estaba completamente rota, aireando así los trapos sucios de los Windsor.

En esa misma intervención en el medio “The Cut”, la estadounidense se quejó de que, si hubiera seguido ocupando un papel activo dentro de la casa real inglesa, nunca hubiera podido llevar a sus hijos al colegio porque “sería un pase de foto real con un corralito de 40 personas haciendo fotos”, unas declaraciones que ahora han sido desmentidas por Chris Ship, un experto en protocolo de la ITV. Según su versión, por el bien de los menores, tan solo se permite grabar el primer día de clase de los pequeños, y no puede haber más de dos cámaras para captar las imágenes. Posteriormente, estos fotógrafos se encargarán de hacer llegar a todos los medios las instantáneas.

Así es como sucede con los hijos del príncipe William y Kate Middleton, y también en el caso de la monarquía española. Cuando la princesa Leonor y la infanta Sofía iban juntas a clase, tan solo se tomaban imágenes del primer día de clase, y el resto del año se respetaba tanto su intimidad como la de los demás menores que acuden a su colegio.

De este modo, parece evidente que Meghan Markle ha emprendido una campaña de desprestigio contra Buckingham Palace, y está dispuesta a llevarla a cabo incluso mediante mentiras o hipérboles que solo tienen cabida en su mente.

Teniendo en cuenta esta situación, no es de extrañar que la relación de los duques de Sussex con el resto de la familia real esté marcada por una constante tensión. De hecho, “The Daily Mail” ha publicado recientemente que el príncipe Carlos ha invitado a Meghan Markle y al príncipe Harry a reunirse con él en su visita al Reino Unido, pero estos han rechazado verse con el heredero. Una muestra más de que una gran brecha los separa de los Windsor y que, de momento, no albergan intenciones de acercar posturas.