Del buffet de los Windsor al postre tradicional de los Grimaldi: el menú de la cena Nochebuena de las casas reales europeas

Esta noche se celebra Nochebuena, una de las citas mas señaladas del año. Todas la familias se reúnen con sus mejores galas para celebrar el inicio de la Navidad y conmemorar el nacimiento de Jesús. Las veladas más importantes de estas fechas giran alrededor de las mesas y cada familia degusta un exquisito manjar diferente, un menú especial para este día tan señalado en el calendario.

En esta tradición, normalmente se suelen repetir los menús cada año, algo que ocurre también en las cenas de las casas reales europeas. En Sandringham, el Palacio elegido donde celebra la Nochebuena la familia real inglesa, el servicio libra el 24 y 25 de diciembre. Por este motivo, la cena de los Windsor suele ser tipo buffet, compuesto por numerosos platos fríos como salmón ahumado en mousse, melón con jamón de Parma, ensalada de judías con rúcula, panaché de verduras con huevos de codorniz, ensalada de gayo y aguacates y ensalada de arroz, entre otros entrantes. El pastel berenjena no puede faltar de segundo plato y, para terminar, algunos postres navideños, como galletas o gelatina.

En la casa real holandesa el menú tampoco varía mucho cada año, compuesto por un entrante típico del país, un plato holandés para entrar en calor, que se trata de unas gachas con cava. De segundo, como marca la tradición, pavo relleno. Para terminar, la reina Máxima sorprende a su familia con un postre típico de su país, alfajores con dulce de leche.

En casa de Alberto y Charléne de Mónaco siempre es el mismo menú. Empanadillas rellenas de diferentes estilos de entrantes y un guiso de bacalao de segundo. Para ellos, el postre es el momento más especial de la cena y está cargado de simbolismo. Tal y como marca la tradición, degustan en total 13 postres diferentes, que simboliza los 12 apóstoles y Jesucristo. Turrón, frutas confitadas o frutos secos son algunos de los platos que conforman este gran postre, que tiene como guinda el chocolate caliente favorito del príncipe Alberto, uno de los dulces indispensables en la mesa de los Grimaldi cada Nochebuena.

En la familia real de Noruega se saltan un poco más la tradición y nunca falta en su mesa cerdo asado a la parrilla, un manjar totalmente diferente a la gastronomía de los países nórdicos. Además, nunca faltan diferentes postres y pastas navideñas típicas de la zona para poner el broche de oro a la cena de Nochebuena.