
Reino Unido
El gran susto de Kate Middleton y el príncipe Guillermo: arrestan a un hombre por colarse cerca de su casa
Las autoridades han abierto una investigación sobre los hechos mientras un testigo describe la situación como "una locura"

Tremendo susto el que se llevaron el pasado domingo 1 de junio en los terrenos del castillo de Windsor. Tal y como se ha informado este martes, un hombre de cerca de treinta años fue detenido tras acceder sin permiso al regio complejo de Berkshire y ser interceptado merodeando muy cerca de Adelaide Cottage, la casa en la que los príncipes de Gales viven con sus tres hijos.
Se trata de una casa relativamente discreta y elegante, similar a la que cualquier ciudadano británico de clase alta podría costearse. Cuenta con cuatro dormitorios y detalles únicos en su decoración, como un techo adornado con delfines dorados. Una vivienda que, en definitiva, representa un estilo de vida más sencillo dentro de la realeza, muy diferente a los palacios y residencias oficiales.
El hombre que se coló en la habitación de la Reina Isabel II
Aunque se ha iniciado una investigación, todo apunta a que el individuo no guardaba intenciones violentas y se baraja que pudiera encontrarse bajo el efecto de alguna droga. “Entró en el castillo cerca de la Puerta de la Ciudad y fue rápidamente detenido por la policía. Fue una locura y causó mucho revuelo, pero parece que no pretendía causar ningún daño grave”, comenta una fuente al diario inglés “The Sun”. De hecho, el hombre ya ha sido puesto en libertad bajo fianza.

Son varios los incidentes y fallas de seguridad que se han reportado a lo largo de la historia de los Windsor, siendo el más llamativo y destacable el ocurrido en el Palacio de Buckingham el 9 de julio de 1982, cuando Michael Fagan, logró colarse en la habitación de la reina Isabel II mientras ella dormía. El susodicho escaló una reja del palacio y logró entrar al edificio sin ser detectado. Deambuló durante un tiempo e incluso rompió un cenicero de cristal y se cortó la mano. Finalmente, entró en la habitación de la Reina, quien se despertó y lo encontró allí. Aunque nunca trascendieron muchos detalles sobre el inesperado encuentro, por lo visto hablaron durante varios minutos antes de que llegara ayuda. Su Majestad no sufrió ningún daño.
En cuanto a Fagan, no fue acusado por entrar al dormitorio porque en ese momento colarse en palacio no era un delito penal, solo una infracción menor. Fue internado en un hospital psiquiátrico durante un tiempo y más tarde tuvo otros problemas legales por varios incidentes, incluyendo posesión de drogas.
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