Harry y Guillermo se evitan en un homenaje a Diana de Gales

Su madre le enseñó que «todo el mundo tiene el potencial de dar algo a cambio, que todos los necesitados merecen una mano de apoyo en la vida». Son las palabras que pronunció anoche el príncipe de Gales en una ceremonia de homenaje a su difunta madre en los Diana Legacy Awards, que tuvo lugar en el Museo de Ciencias de Londres. En su discurso de conmemoración del 25 aniversario de la organización benéfica, Guillermo no hizo ninguna alusión a su hermano Harry. Sí tuvo presente a su esposa Kate: «Ese legado es algo en lo que tanto Catherine como yo hemos tratado de centrarnos a través de nuestro trabajo, al igual que los 50.000 jóvenes que han recibido un Premio Diana en los últimos 25 años. Estoy muy orgulloso de ver este convencimiento de mi madre manifestado en los increíbles jóvenes que reciben el Premio Legacy esta noche».

Si bien los premios Diana se entregan anualmente –normalmente con la participación de los dos hermanos–, cada dos años se conceden también los Legado de Diana, introducidos en 2017 para marcar el 20 aniversario de la entidad y al que optan los receptores del otro galardón.

Tras su discurso, William abandonó la gala para acudir junto a su esposa, Kate Middleton, que continúa convaleciente de la cirugía abdominal a la que fue sometida el pasado mes de enero. Una excusa perfecta para no coincidir con su hermano, quien se unió por videoconferencia con los ganadores, ya que desde que dejaron de ser miembros activos de la monarquía vive junto a su mujer, Meghan Markle, y sus hijos, Archie Harrison y Lilibet, en Montecito (California). La participación del duque de Sussex tuvo lugar una vez que el primogénito de Carlos III había abandonado ya el museo, lo que pone en evidencia una vez más la mala, o nula, relación existente entre ambos hermanos.

Hasta ahora, ambos habían hecho el esfuerzo de reunirse cuando las circunstancias no les permitían hacer otra cosa. Sin embargo, en este acto en recuerdo de la princesa Diana han optado por no hacerlo. El 18 de mayo de 2017 William y Harry acudieron, sin embargo, juntos a este acto. Los hijos de Carlos III y Lady Di han estado siempre muy unidos, sobre todo tras la trágica muerte de su madre en 1997, en un accidente de tráfico en Paris. La relación comenzó a deteriorarse cuando Harry y Meghan concedieron su explosiva entrevista a Oprah Winfrey, en 2021, en la que acusaron a la familia real de racismo. La biografía del duque, «Spare» («En la sombra», en español), tampoco sirvió para unirles. En ella se revelaba que la comunicación entre ambos había sido tensa: «Siempre ha existido esta competencia entre nosotros», revelaba.

A pesar de esta distancia, el experto real de GB New Cameron Walker, considera que el hecho de que los hijos del rey Carlos todavía estén dispuestos a participar, aunque sea virtualmente, «demuestra que ambos están increíblemente comprometidos con honrar el legado de su difunta madre».