Carlos III abre la temporada en Balmoral

Ya está en Balmoral. Este año mucho más tarde de lo que venía siendo habitual en los veraneos de la Familia Real británica. A la difunta reina Isabel II le gustaba pasar casi todo el verano en la finca escocesa, sin embargo, en su primer año como monarca, Carlos III ha decidido extender el horario de apertura al público de la residencia real durante dos semanas más lo que ha hecho que los Windsor no hayan podido disfrutar durante todo el mes de agosto de este espectacular paraje.

Balmoral es propiedad privada del soberano británico y, por lo tanto, es él quien cubre sus costes personalmente. Según Daily Mail su mantenimiento supone tres millones de libras anuales (3,5 millones de euros). Entre abril y finales de julio lo visitan una media de más de 70.000 turistas y los ingresos obtenidos de estas visitas cubren tan solo la mitad del gasto de la finca.

La propiedad fue comprada por el príncipe Alberto, marido de la reina Victoria, en 1852, y desde el fallecimiento de Isabel II, el 8 de septiembre de 2022, Carlos III decidió que permaneciera abierta a los visitantes y turistas todos los días hasta el 16 de agosto. Uno de los mayores afectados por esta decisión ha sido el defenestrado príncipe Andrés de Inglaterra que solía instalarse allí desde el último fin de semana de julio. Ya es de sobra conocida la mala relación de los dos hermanos desde que el duque de York fuera relacionado con el pedófilo Jeffrey Epstein.

La realidad es que Carlos III y la reina Camilla ya están en Balmoral. Después de una estancia en el Castillo de Mey, la antigua casa de su abuela, la Reina Isabel, la Reina Madre, el monarca se ha trasladado a Escocia y allí recibirá a amigos, familiares e invitados VIP, incluido el primer ministro Rishi Sunak. Una estancia que se prolongará hasta principios de octubre, cuando el rey regrese a Inglaterra para conmemorar el aniversario de su ascensión en Escocia.

Quizá unos días antes, según la prensa británica, se produzca el encuentro más esperado, o no, para los miembros de La Firma. En los últimos años se han vivido momentos muy tensos que han tenido como protagonistas al príncipe Harry y a su padre. Hace unos meses Carlos III fue coronado como monarca del Reino Unido, lo que ha llevado a que la relación se haya distanciado aún más, motivada no solo por la salida del menor de sus hijos de la familia real británica, sino por su polémica entrevista concedida a Oprah Winfrey así como sus reveladoras memorias.

Sin embargo, todo parece indicar que será después del verano cuando podría firmarse un armisticio. Aunque la relación es prácticamente inexistente desde hace años, el duque de Sussex quiso acompañar a su padre el día de su coronación, siendo esto un detalle importante para el monarca, a pesar de que no pasara en Inglaterra ni siquiera 24 horas.

Desde entonces no ha habido ninguna ocasión, tampoco se ha buscado, para acercar posturas. Pero aseguran fuentes próximas a Buckingham que será el próximo 17 de septiembre, cuando padre e hijo se reúnan para mantener «conversaciones sobre la paz» en el palacio real. Será en esta fecha ya que por entonces el monarca regresará al Palacio de Buckingham y Harry habrá finalizado con varios eventos en Alemania, por lo que teniendo días libres ambos han tomado la decisión de verse. Lo que es seguro también es que Carlos III ha asegurado que de llegarse a producir el encuentro, lo harán en secreto.

Por otro lado, la Policía británica anunció este lunes que cerró una investigación sobre el presunto intercambio de títulos honoríficos por donaciones a la fundación del rey Carlos III. El caso estalló en febrero de 2022, después de que una investigación independiente reportada por medios locales acusara al rey y a Michael Fawcett, director de la Fundación del Príncipe y asesor de confianza del monarca, de prometer títulos honoríficos y la ciudadanía británica a cambio de cuantiosas donaciones al empresario saudita Mahfouz Marei Mubarak bin Mahfouz. Mahfouz recibió un título honorario de la Orden del Imperio Británico, el más alto reconocimiento brindado por la Corona, a fines de 2016, lo que levantó sospechas alrededor de las donaciones que había hecho para la Fundación. El Equipo de Investigación Especial de la Policía Metropolitana de Londres indicó en un comunicado que había decidido cerrar la investigación. «No se tomarán más medidas en este asunto», zanjó la Policía en un comunicado, informó la cadena de noticias BBC.