El Rey Carlos III reaparece en la Misa de Pascua, marcada por dos importantes ausencias

El Domingo de Pascua es una de las citas más importantes para la Familia Real inglesa y cada año se dan cita en la capilla de St. George del Castillo de Windsor para atender el servicio religioso. En esta ocasión, la expectación era mayor teniendo en cuenta el complicado momento que atraviesa la Corona a raíz de la convalecencia de dos de sus pesos más pesados: el Rey Carlos III y la princesa Kate Middleton, ambos enfermos de cáncer.

Sin embargo, hace días que se confirmó que el monarca sí se uniría al resto de su familia en esta fecha marcada en su calendario. Se trata de la primera vez que Carlos III se deja ver en público en un acto multitudinario desde que se anunció que padece cáncer, aunque sí se han difundido imágenes y fotografías del soberano trabajando en su despacho o reuniéndose con diferentes personalidades.

Carlos III no ha borrado la sonrisa de su rostro y se ha mostrado muy enérgico en su primer baño de masas desde el anuncio. Ha estado arropado de casi toda su familia, empezando por la Reina Camilla, quien en los últimos meses ha tomado un papel más relevante en la Corona a consecuencia de la enfermedad de su marido.

Tampoco se han perdido este servicio religioso especial los hermanos del Rey Carlos III: la princesa Ana, acompañada de su marido Sir Tim Laurence; el príncipe Andrés y su exmujer, Sarah Ferguson; y el príncipe Eduardo y su mujer, Sofía de Edimburgo.

Este Domingo de Pascua, una de las citas más destacadas de los Windsor, se ha visto algo deslucido por la previsible ausencia de Kate Middleton, el príncipe Guillermo y sus hijos. Se conoce que la princesa de Gales ha comenzado un tratamiento de quimioterapia contra el cáncer y quiere sobrellevar esta etapa en la más estricta intimidad, una decisión que la familia respeta. De ahí que su marido haya preferido ausentarse en el Castillo de Windsor este domingo, en una muestra de apoyo incondicional a la madre de sus hijos.

Tampoco han estado -ni se les esperaba- los duques de Sussex. En un momento de máxima distancia con su familia, ni el príncipe Harry ni Meghan Markle han sopesado si quiera acudir a la capilla de St. George, aunque lo cierto es que en el caso de la actriz, ella nunca ha participado en el Domingo de Pascua. Sí lo hizo, antes del Megxit, el príncipe Harry, que acudió en solitario con el pretexto de que su esposa estaba embarazada y se quedó en casa descansando.