Pilar, esa alegría de ministra de Educación

Recuerdo que antes nos aconsejaban la gimnasia sueca. Entendimos el concepto a la manera ibérica y nos dedicamos a perseguir suecas con Alfredo Landa a la cabeza. Ahora el Círculo de Empresarios propone la jubilación a los 70 años y el sistema sueco de pensiones, donde la cotización del trabajador va a una hucha personal. Ah, la hucha personal. Quieren que volvamos al cerdito (ahora sueco) con ranura en el lomo de toda la vida, ya ven. En este país de nuestros pecados la última moda es siempre un retorno, la vuelta al No-Do. O esa impresión tiene uno a veces, sobre todo cuando sacan a pasear a Franco como si fuera mano de santo (brazo de Santa Teresa) contra la pandemia. Dicen los expertos que nuestro sistema educativo sepulta el progreso: un universitario español tiene el mismo nivel que un alumno de bachillerato de Holanda o Japón. Pilar, esa Alegría de ministra de Educación, dirá que eso no quiere decir que el nivel educativo español sea bajo, sino que el nivel holandés y japonés es altísimo.

Cuando preguntan a la ministra Alegría por el 25 % de la enseñanza en castellano en Cataluña, responde: «Es una cuestión compleja que hay que analizar de modo técnico». Traducido al idioma coloquial: «Ha dicho Él que todos quietos parados para no cabrear a nuestros socios separatistas catalanes». Harry Gee, prestigioso paleontólogo, escribe en la revista «Scientific American»: «El homo sapiens podría ser ya una especie muerta que camina”. Claro, observen la cantidad de gente que camina sin levantar la mirada del móvil. No es que ya solo seamos tontos o zombis: es una cuestión compleja que hay que analizar de modo técnico, diría Alegría.