Estética

El último retoque de Rocío Flores con el que corta definitivamente con su pasado

La malagueña ha experimentado un notable cambio físico desde que dio el salto al mundo mediático

Rocío Flores
Rocío Flores@jmanzanophoto

Rocío Flores ha vuelto a pasar por “chapa y pintura”. Desde que se dejó caer por la esfera mediática, durante la participación de su padre, Antonio David, en “Gran Hermano VIP 7″, la joven ha experimentado un notable cambio físico marcado por su bajada de peso y los numerosos retoques estéticos a los que se ha sometido. El último y más agresivo consistió en una modelación a su gusto de su silueta, un proceso conocido como lipoescultura.

Ahora, la nieta de la Jurado ha compartido a través de su cuenta oficial de Instagram, donde acumula más de 790.000 seguidores, un nuevo retoque estético al que se ha sometido. Rocío Flores ha decidido cortar definitivamente con parte de su pasado y eliminar de forma permanente los tatuajes que decoran su piel. “No es ninguna lesión, me estoy borrando los tatuajes y los tengo que llevar tapados una semana”, ha indicado la influencer en la sección de historias de su perfil de Instagram.

Algunos de los tatuajes de Rocío Flores
Algunos de los tatuajes de Rocío FloresRocío FloresInstagram

Se desconoce si Rocío Flores quiere borrar todos los tatuajes de su cuerpo o solo unos en concreto, pero de momento ha empezado con los que lucía en su brazo izquierdo. Sigue así el ejemplo de su tía Gloria Camila, que hace unos meses anunció que también comenzó un tratamiento para eliminar de forma definitiva algunos grabados de su piel, especialmente los que se hizo en la época en la que mantenía una relación sentimental con Kiko Jiménez.

Los tatuajes se eliminan mediante un tratamiento láser que, dependiendo de la zona, puede ser más o menos doloroso. Para alcanzar los resultados óptimos se pueden llegar a requerir varias sesiones, pero ni aun así se garantiza que no quede alguna cicatriz o restos visibles del antiguo dibujo.

Los retoques de Rocío Flores

Como se ha comentado anteriormente, son varias las ocasiones en las que la hija de Rocío Carrasco se ha puesto en manos expertas para mejorar su imagen. La primera cirugía que se le conoció fue la bichectomía, un proceso que consiste en extraer unas acumulaciones de grasa de la cara para que el rostro se vea más delgado y afinado. Después, pasó por quirófano de nuevo para modificar el aspecto de su pecho y, posteriormente, de su silueta con la lipoescultura.

Rocío Flores, antes y después de algunos de sus retoques
Rocío Flores, antes y después de algunos de sus retoquesClínicas Pérez DíazLa Razón

Además, Rocío Flores también ha recurrido al milagroso ácido hialurónico para modificar sin cirugía algunas partes de su rostro, como la nariz o los labios.