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La millonaria herencia de Olivia Valère, la reina de la noche marbellí

Karen, la hija de la empresaria, será su sucesora. Adelantamos los homenajes y detalles de su legado

Olivia Valère en 2019
Olivia Valère en 2019KMJ/KMAGTRES

Olivia Valère, la reina de la noche marbellí del siglo XXI, tenía siempre un lema: «La marioneta no se mueve sola, hay que levantarla y moverla». Y con esa perspectiva organiza su familia estos días el emporio que les legó, para poner el negocio de la noche de nuevo en alza. Hablamos de una mansión en Guadalmina, la zona más selecta de Marbella que roza los dos millones de euros y una empresa, Sociedad de Explotaciones Mov, que tiene ingresos anuales por más de cuatro millones de euros y gestiona la discoteca más famosa de la Costa del Sol. Tal como decía la dama del glamour marbelli: «Y que siga la fiesta». La empresaria de origen francés, que regentó la «nuit» de la ciudad costasoleña durante los últimos lustros, y convirtió Marbella en un lugar de encuentro de personajes que querían conocer la magia de la discoteca Babilonia, ha dejado muy vivo su espíritu. Así lo cuentan a LA RAZÓN los familiares que se harán cargo, de que todo funcione a la perfección el día de su inauguración de temporada. Será el próximo 7 de julio, y tienen claro que «Olivia, revoloteará como una mariposa entre los asistentes». Sus hijos Karen y Xavier serán claves en esta nueva andadura, algo que no se ha improvisado ya que la empresaria lo tenía todo desde hace años repartido. La «pequeña Valère», como la llamaba su madre, es la ideal para regentar el imperio. «Trabajar con ella es fantástico. Es muy importante que mi hija haya venido para seguirme, porque ella tiene la forma de mirar de la juventud. Yo soy de la antigua escuela», apostilló a la que escribe recientemente.

Por lo tanto el día de San Fermín se abrirán los pórticos de Babilonia y se espera una fiesta de esas que hacen época: «Vendrán personajes de todos sitios. La mujer de Antonio Banderas, la modelo Nicole Kimpel, ya ha confirmado. A pesar del dolor que aun tenemos por la muerte de Olivia, será un homenaje a ella donde no faltara de nada», comentan familiares de la empresaria a este medio.

La conocida diseñadora Marili Coll, muy amiga de los Valère, va a organizar un funeral homenaje en Madrid para el 9 de septiembre, donde acudirán sus amigos de la capital. La familia se ha visto desbordada por las muestras de afecto de la gente, que tanto quería a la francesa. Como dice uno de sus amigos: «Todo sigue como quería ella. Así lo dijo antes de morirse y así lo hemos respetado». De hecho la discoteca apenas cambiará, «eso sí, hemos contratado a Salmman, un magnifico profesional, que va a hacer fiestas tipo Studio 54 y será genial. La idea de equipo, que era el modus operandi de la jefa, va a seguir siendo nuestro lema, eso quedará intacto».

Olivia Valère durante la Gala Concordia 2016 en Marbella
Olivia Valère durante la Gala Concordia 2016 en MarbellaKMJ/KMAGTRES

También sus nietos, como Julián, organizarán sus propias fiestas en la discoteca. A Olivia le hacía mucha gracia la última ocurrencia de su «petit enfant». «Todos han sacado algo de mí. Este se acaba de inventar este último evento que se llama Pueblo Loco, una fiesta muy de la época de la Marbella de los setenta con motivos mexicanos. Si quiero seguir siendo el número uno de la ciudad hay que buscar esta esencia de la juventud». Estas fueron sus últimas palabras, antes de que la enfermedad acabara con ella.

Una avenida en Marbella

En Marbella ya se habla de La Avenida Olivia Valère. Los homenajes siguen sucediéndose y su viudo Phillipe, con 81, años no para de dar gracias por estas muestras de afecto. Se da la circunstancia de que en la villa de Guadalmina donde residía la empresaria, ahora se quedan a vivir las dos personas que más amó: su primer marido Albert y su viudo Phillipe. En esta casa creó su hogar. En los comienzos, con su primer esposo Albert, con el que tuvo dos hijos, Karen y Arnaud. Se separaron, pero su relación fue tan buena, que ha querido en su herencia que se quede en su villa, mientras viva. Algó así como un usufructo vitalicio. Hablamos de una mansión de mil metros y dos hectáreas de parcela. En vida, Albert convivía con ella y con su segundo esposo, el abogado Philippe Valereiba, con el que iba a celebrar sus bodas de oro.

Con él tuvo a su tercer hijo, Xavier. Su esposo Philippe, contaba a este medio que «Olivia tuvo la gran suerte de estar los últimos quince días despidiéndose. El regalo más grande que le podemos hacer a Olivia es que este verano la discoteca funcione como si estuviera viva». La gallina de los huevos de oro continuará amasando una fortuna. Esta es la gran herencia de Olivia con los suyos.