El polémico regreso de Ortega Cano a Las Ventas

Siempre es un placer volver a la plaza de Las Ventas. En Madrid no importa que sea primavera que otoño, que caigan chuzos de punta o que todavía apriete el calor del «veranillo de San Miguel», cualquier época es buena para enfundarse con las mejores galas, almohadilla en mano, «procesionar» hasta la Monumental, y disfrutar de una tarde de toros; eso sí, no sin antes haber tomado un refresco en las barras de la puerta de arrastre, el lugar de referencia para todo aquel taurino de pro donde se puede ver desfilar hacia la plaza desde el ganadero hasta el político de turno, y, por supuesto, donde Miguel Abellán se asienta cada tarde para recibir con la mayor de las sonrisas a todo aquel que se acerca a saludar.

La Feria de Otoño comenzó el fin de semana del 1 y 2 de octubre acogiendo un mano a mano entre dos de los novilleros triunfadores de la temporada venteña, Víctor Hernández y Álvaro Alarcón, con novillos de Fuente Ymbro; y continuó esta semana con dos novilladas y cuatro corridas. La de este viernes, protagonizada por seis toros de El Pilar para el riojano Diego Urdiales, y los sevillanos Juan Ortega y Pablo Aguado. Una tarde que se cogió «con ganas» entre los aficionados y donde pudimos ver, como ya es costumbre, a El Fundi junto a su mujer, Ana Belén Escolar; también a la viuda de Jaime Ostos, María Ángeles Grajal, y a José Ortega Cano, que entró último, esquivando las preguntas de los reporteros que le esperaban en la puerta de la plaza, «preocupados» por su supuesto divorcio con Ana María Aldón. Un momento de tensión en el que casi pierde los papeles, haciendo un amago de propinarle un puñetazo a uno de los reporteros. Afortunadamente eso no sucedió.

Otros de los incondicionales feria tras feria, el escritor Juan del Val, el juez Andrés Sánchez Magro y, por supuesto, el que fuera empresario de Las Ventas durante quince años, Eduardo Lozano.

Llamó la atención en el tendido los rostros más jóvenes, entre los que se encontraba Blanca Aguado, prima del diestro sevillano junto a su grupo de amigos.

Los políticos también eligen este coso una vez más: María Dolores de Cospedal y su marido Ignacio López del Hierro no podían faltar a esta corrida, tampoco quiso perdérsela María Eugenia Carballedo, Presidenta de la Asamblea de Madrid; Enrique Astarloa, presidente del Consejo Consultivo de la Comunidad de Madrid, y Enrique López, Consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid.