Alejandra Rubio anuncia cambio de vida y una firme decisión para criar a su hijo

Alejandra Rubio está de vacaciones, aunque en realidad podría decirse que está en el paro, pues no tiene un trabajo al que regresar cuando sus días de asueto lleguen a su final. La cancelación de ‘Así es la vida’ le ha dejado sin programa en Telecinco donde ejercer su papel como colaboradora. Sin embargo, en el quinto mes de embarazo se le presenta un nuevo negociado del que podría sacar jugosos beneficios. Como ya hizo al anunciar su estado de buena esperanza con Carlo Costanzia en la portada de la revista ‘Hola’ mediante la correspondiente exclusiva bien remunerada, se le abre un abanico de oportunidades. Para una influencer, ser madre puede ser un empujón importante en su carrera en las redes sociales. Algo que la hija de Terelu Campos podría hacer ahora que se ha quedado sin trabajo para asegurarse una fuente de ingresos más allá del kiosco rosa. Sin embargo, parece que no quiere seguir los pasos de sus homólogas ni de su propia familia, optando por la vía menos popular.

Con un bebé en camino, Alejandra Rubio está reformulando sus prioridades y poniendo su vida en orden, ahora que tiene tiempo suficiente al no tener que acudir a las instalaciones de Telecinco. Pero antes de hacer las maletas y refugiar sus días en un destino vacacional, ha querido compartir sus inquietudes con Nagore Robles y Germán González en el podcast ‘La casa de mi vecina’. Una vía en la que ha dejado claro que está persiguiendo un cambio de vida para antes de que llegue su bebé y, de paso, cómo afrontará la maternidad. Y será de forma muy distinta a la que ha visto en casa, alejándose de los pasos dados años atrás por las Campos.

Todos sus planes pasan por aparcar su versión como colaboradora para apostar por su faceta como influencer: “Me gustaría encaminar mi vida a más redes y menos tele y corazón”. La televisión no le está dando las alegrías que deseaba y le coloca en ocasiones entre la espada y la pared. Siempre defiende su intimidad y privacidad, aunque a diario tiene que saltársela al hablar de cada detalle de su vida personal y la de sus seres queridos. Algo que solo hace con alegría cuando hay exclusiva de por medio y la cuenta corriente anota un buen pellizco. Pero esto se ha acabado, pues antes de que nazca su bebé quiere poner fin al pasado y comenzar una nueva vida que, según confiesa, pasa por dejar los platós y también alejarse de las polémicas que arrastra su familia. Algo que solo puede conseguir siendo exclusivamente influencer, como ya demostró que se podía hacer Laura Matamoros cuando se alejó de Telecinco y se hizo de oro.

Alejandra Rubio, eso sí, tiene muy claro que su bebé no va a ser ‘vendido’ en las redes sociales: “No le voy a exponer”, sentencia segura de que va a cumplir su promesa y mantendrá a su hijo fuera de sus publicaciones y de las portadas del papel cuché. Algo que habría consensuado ya con su novio, Carlo Costanzia, y que ha dejado claro en el podcast, detallando cuál es su plan. Lo primero que debe hacer si quiere ser influencer y vivir de sus ingresos es subir el número de seguidores, pues ahora anota tan solo 320.000 en Instagram. Esto lo conseguirá fidelizando a los que ya tiene alejándose de escándalos, además de incrementando la periodicidad de sus publicaciones para atraer nuevos adeptos. Por ahora está lejos de conseguirlo, más si no quiere aprovechar la oportunidad que supone la maternidad para llegar a un público mayor. Pero ya ha generado un buen montante estos años y siempre le quedará una exclusiva en el kiosco rosa de vez en cuando para ir pagando facturas si llega el caso, como así lo entiende su madre y su tía.