Relaciones

Alejandra Rubio reconoce que ella no es el gran amor de su novio, Carlo Costanzia

Es una mujer a la que conoce desde que nació, la que lo cuidó cuando estuvo viviendo en Italia y la que le sigue demostrando un cariño sin límites

Alejandra Rubio y Carlo Costanzia
Alejandra Rubio y Carlo CostanziaGtres

Su gran amor no se llama Alejandra, es una mujer a la que conoce desde que nació, la que lo cuidó cuando estuvo viviendo en Italia y la que le sigue demostrando un cariño sin límites.

Alejandra Rubio es consciente de que, por encima del resto, el corazón de Carlo Costanzia, su novio y padre de su único hijo, lo ocupa en buena parte su abuela paterna, una persona por la que el hijo de Mar Flores siente verdadera devoción. Él lo asegura muy claro en sus redes sociales: "Mi abuela está por encima de mis padres, de Alejandra, de todos. Es mi gran amor, la mujer de mi vida. A la que más quiero".

Y la hija de Terelu lo acepta sin problemas, porque sabe de la estrechísima unión que existe entre abuela y nieto. Tal es así que Alejandra ya conoce a la buena señora y existen imágenes en las que aparecen los tres juntos, demostrando su empatía.

A la abuela le gustaría ver casado a su nieto con la hija de Terelu; se llevaron muy bien desde el primer día y le ha cogido mucho cariño. Pero, por su avanzada edad, le resultaría muy difícil desplazarse a otro país y su sueño es que el enlace tenga lugar en Italia, lo que supone un problema porque sería una boda incompleta de invitados.

Mar Flores, madre del novio, no mantiene el menor contacto con la familia paterna de su hijo y brillaría por su ausencia en un día tan especial. Tampoco existe una relación cordial con Terelu: las consuegras nunca se llevaron bien y no hay ni una sola foto en la que aparezcan juntas. La papeleta para los novios es más que evidente. El clima familiar es absoluto y no tiene posibilidades de remediarse.