Opinión

El diario de Amilibia: El que avisa no es traidor

"Dicen que con estas declaraciones el fiscal solo pretende provocar temblores en el PP"

Álvaro García Ortiz, Fiscal General del Estado, en entrevista con LA RAZÓN
Álvaro García Ortiz, Fiscal General del Estado, en entrevista con LA RAZÓNGonzalo PérezGonzalo Pérez

Álvaro García Ortiz, fiscal general del Estado, ha dicho: «Los fiscales manejamos muchísima información. Le aseguro que, si yo quisiera hacer daño a un determinado espectro político, tengo información de sobra, que por supuesto no voy a usar jamás». Bueno sería que, ante tal andanada, Feijóo rociara con sal gorda la sede de Génova y colocara en ella abundantes plantas de romero y bambú, que me ha dicho mi vecina Carlota que van muy bien contra las malas vibraciones o las personas tóxicas. Dicen que con estas declaraciones el fiscal solo pretende provocar temblores en el PP. ¿Temblores? Hermeneutas expertos en García Ortiz consideran que más bien quiere aterrorizar al PP hasta ponerle los pelos de punta, cosa que disgusta mucho a Cuca Gamarra porque la obliga a ir todos los días a la pelu, como una Yoli cualquiera. El fiscal habla de «espectro», que, según la RAE, es fantasma o imagen de una persona muerta.

 el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante una sesión de control al Gobierno, en el Congreso de los Diputado.
el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante una sesión de control al Gobierno, en el Congreso de los Diputado.Gonzalo PérezLa Razón

Apunta a un «espectro político». ¿Considera, con Tezanos, que el PP es ya un partido fenecido, zombi, kaput? ¿El PP es ya solo espíritu, sombra o ánima? Bien es verdad que Feijóo se ha quitado las gafas y muestra una imagen diferente, menos doctoral, pero no creo que la cosa sea como para llamarle visión horripilante, espantosa o fantasmal. Antes de contactar con Iker Jiménez para ver qué se puede hacer para salir de esta situación fúnebre, Feijóo consultará con su tía la monja. Quizá le aconseje plegarias para resurrecciones estilo Lázaro y, de paso, combatir las provocaciones satánicas.

Aclaró el fiscal que esas informaciones «no va a usarlas jamás». Bueno, puede filtrar. En sus tiempos de fiscal en Galicia descubrieron que era alérgico al marisco. Así que no se le ocurra a Feijóo enviarle percebes para aplacarlo. Podría acusarle de intento de homicidio, para empezar.