Polémica

¿Se esconde Marcela Basteri tras Honorina Montes? El misterio (no tan misterioso) de la desaparecida madre de Luis Miguel

La pista de la exactriz y modelo italiana se perdió en Madrid en 1986 cuando Luis Miguel contaba con una gran popularidad

Luis Miguel con su madre, Marcela Basteri
Luis Miguel con su madre, Marcela BasteriRedes sociales

Así, de entrada, esta historia tiene elevadas dosis de relato de suspense. Sí, podría estar firmada por un novelista de thrillers o un guionista de Hollywood. Una exactriz y exmodelo italiana a la que se da por muerta desde hace cuatro décadas (aunque su cuerpo jamás ha sido encontrado), madre del que es posiblemente el más famoso cantante mexicano del momento, podría estar viva y hallarse en Argentina bajo otra identidad. Si los textos tuvieran la capacidad de emitir sonido, en este justo instante usted, lector, estaría escuchando una música de misterio. Y si continúa leyendo con atención este artículo, tal vez le llegue esa melodía sobrecogedora. Mientras tanto, inserto aquí el titular: Marcella Basteri, quien trajo al mundo a Luis Miguel, superlativa estrella latinoamericana de la canción, podría seguir entre los vivos. Así lo sostienen, al menos, dos mujeres, Ivana y Flavia Carla Basteri, primas lejanas del artista mexicano nacido en Puerto Rico, quienes aseguran disponer de pruebas «contundentes» que confirmarían que Marcella vive. Las Basteri han batallado duro y han conseguido que una jueza argentina ordene la realización de una prueba de ADN a Honorina Montes, que se encuentra internada en un hospital psiquiátrico de Buenos Aires tras vivir durante años como una sintecho, para cotejar los resultados con las muestras que les han sido tomadas a ellas.

Ivana y Flavia Carla han pisado distintos platós de televisión en los últimos años, en los que han mostrado fotos de ambas mujeres para señalar el evidente parecido y la coincidencia de lunares en las mismas zonas de su anatomía, amén de asegurar que Honorina Montes les hizo revelaciones de carácter íntimo que en modo alguno podía conocer alguien ajeno a la familia.

Telefilme de sobremesa

Hasta aquí, seguimos inmersos en un thriller potente. Pero enseguida se va a convertir en un pobre telefilme de sobremesa, o en algo peor. Porque esta noticia que salta ahora con estruendo de primicia, lejos de ser nueva viene de unos años atrás, y tiene la misma verosimilitud que algunos avistamientos de seres extraterrestres con forma humana.

Luis Miguel de adolescente con su madre
Luis Miguel de adolescente con su madreIG

Fue una youtuber argentina la que activó este culebrón tras colgar en su canal fotos y vídeos de una indigente de Buenos Aires que se parecía extraordinariamente a la madre del artista. Aquello coincidió con el estreno en Netflix de la primera temporada de la serie sobre el cantante, e hizo que los periodistas cayeran sobre la citada «homeless» convencidos de que estaban ante la noticia periodística de la década. Pero las explicaciones que la mujer empezó a ofrecer alertaron de sus orígenes españoles; en concreto, del concejo de Bimenes (Asturias). Varios periodistas contactaron con vecinos de ese lugar, quienes tras visionar el vídeo avisaron a Rubén Montes, que reconoció en esas imágenes, sin ningún género de duda, a su hermana Honorina. La última vez que esta había visitado Bimenes fue en 1992. La asturiana residente en Argentina arrastra un largo historial de problemas de salud mental, y fue ingresada en un psiquiátrico con sólo 18 años. Abandonó pronto aquellas verdes praderas y estuvo viviendo primero en Estados Unidos y más tarde en España, en Madrid, donde las autoridades, tras el circo mediático formado, aseguraron que las huellas dactilares que tienen registradas de Honorina disipaban cualquier teoría rocambolesca acerca de su falsa identidad. El Gobierno asturiano agilizó los trámites para repatriar a su paisana y pusieron a su disposición una plaza en una residencia, pero Honorina se negó a regresar a su país. Por otra parte, en 2021 la Corte Suprema de Justicia de la Nación, el más alto tribunal judicial de Argentina, desestimó una demanda interpuesta por las Basteri y frustró la posibilidad de llevar a cabo una prueba de ADN. Pero ahora la Fiscalía Nacional Argentina en lo Criminal y Correccional ha satisfecho los deseos de las demandantes y en un laboratorio se encuentra la respuesta al enigma.

Luisito Rey, su mánager

La pista de Marcella Basteri se perdió en Madrid, en 1986, cuando Luis Miguel era una belleza de 16 años que ya contaba con una colosal popularidad en México y en España: tenía nueve discos publicados, millonarios en ventas, y un año antes había recibido el primero de los seis Grammy estadounidenses que atesora. El padre de Luis Miguel y marido de Marcella, Luis Gallego Sánchez, conocido artísticamente como Luisito Rey, era gaditano, pero se estableció en México con su mujer y sus tres hijos, y en cuanto vio el potencial que tenía el primogénito, abandonó su carrera de cantante y se dedicó en exclusiva a custodiar la de su hijo. Así fue hasta que Luis Miguel, en 1988 (dos años después de la desaparición de su madre), alcanzó la mayoría de edad y prescindió de sus servicios como mánager. El artista tuvo que hacer un esfuerzo titánico para sanear las cuentas, puesto que la mala gestión de su padre había generado deudas cuantiosas. Luisito Rey falleció en 1992 a causa de una neumonía, con sólo 47 años.

Luis Miguel y Luisito Rey
Luis Miguel y Luisito ReyTelemundo

El biógrafo oficial de Luis Miguel, Javier León Herrera, ya declaró hace cuatro años, coincidiendo con el estreno de la primera temporada de la serie de televisión sobre la vida del artista (basada en uno de sus libros), que esa teoría de que Honorina Montes es en realidad Marcella Basteri es absurda y que estaba alentada por algunos miembros de la propia familia, teóricamente en busca de algún tipo de rédito económico. El biógrafo aseguró a su vez que Marcela murió en Madrid el mismo año de su desaparición, y dijo disponer de pruebas que así lo confirmaban, pese a que no podía hacerlas públicas puesto que Luis Miguel, que encargó una investigación por su cuenta, siempre ha querido mantener toda esta historia en secreto. Además, deslizó que en el momento de la desaparición ella se encontraba en Madrid con su marido y que todos los indicios apuntaban a su implicación directa. El padre, para justificar la ausencia de la madre, les anunció a sus tres hijos que se había fugado con un mafioso italiano, extremo que el biógrafo desmintió de forma categórica.

Este caso recuerda a otros tristemente célebres, como el de la infausta Ylenia Carrisi, hija de Romina Power y Al Bano, y el de la niña Madeleine McCann. Surge de pronto como una explosión la especie de que pueden seguir vivas, pero avanzan los días y, tras las investigaciones de rigor, la lógica más aplastante se acaba imponiendo, y con ella la decepción. En este caso, lo más probable, lo casi seguro, es que ocurra eso mismo: una falsa alarma, esa mujer no es Marcella Basteri, la madre del hiperbólicamente apodado El Sol de México, sino, en efecto, Honorina Montes, una española desnortada a la que sus facciones y el azar le han dado sus 15 minutos y medio de fama. Es muy posible que el único que conozca todos los detalles de la suerte que corrió Marcella sea su hijo mayor, uno de los artistas más esquivos y blindados del panorama musical en lengua española, quien ha encontrado en una española remorena, elegantísima y discreta, Paloma Cuevas, ese calor que siempre le faltó en la infancia.

Hasta que se aclare, el misterio mantiene viva la esperanza y el público permanece encogido en sus asientos. A la espera del veredicto de la ciencia, que es inapelable.