El espejo del alma de Tamara Falcó: nuevo cuerpazo estival y un secreto en sus piernas

Este verano, Tamara Falcó ha decidido hacer alarde de amor y complicidad en las redes sociales, deslumbrando con su figura en bikini mientras disfruta de días de sol junto a su esposo, Íñigo Onieva. No es de extrañar que la marquesa de Griñón haya acaparado titulares, especialmente después de aparecer en la portada de una revista. ¡Pocas pueden presumir de un cuerpazo como el suyo!

Sin embargo, la transformación estética de Tamara no ha sido un camino fácil. A diferencia de su madre, Isabel Preysler, conocida por su delgadez casi etérea, la noble ha tenido que enfrentar a su genética, que tiende a anexar un poco más de peso. Y que nadie se engañe, no son las irresistibles comilonas con su esposo las que tienen la culpa de esto. Tras lidiar con problemas de tiroides y la posible amenaza del lipedema, Tamara ha tomado las riendas de su bienestar.

Las tres claves de su transformación son claras: nutrición, ejercicio físico y tratamientos estéticos. En cuanto a su «coach» nutricional, esta profesional se ocupa de diseñar un plan alimenticio adaptado a las necesidades de Tamara, centrándose en una dieta equilibrada que le aporte energía y cuide su salud. Aquí no hay lugar para las dietas restrictivas, sino que se opta por una mezcla de proteínas magras, muchas verduras y esos pequeños placeres que se disfrutan con moderación.

Oxigenar tejidos

Sobre el ejercicio físico, la marquesa se toma muy en serio su rutina de entrenamiento. Con un entrenador personal a su lado, combina ejercicios de fuerza y cardio. Desde pilates hasta sesiones intensas de HIIT (entrenamiento por intervalos de alta intensidad), Tamara está en plena forma y ese compromiso se nota en sus brazos tonificados y su figura más definida.

Y, por último, los tratamientos estéticos en la clínica de la gran Carmen Navarro no son solo un capricho, sino una parte fundamental para ayudar a descongestionar y activar su circulación. Es muy disciplinada y me aseguran que acude todas las semanas durante el año . Le van bien especialmente el LPG para «desfibrosar» y oxigenar tejidos y así eliminar la temida celulitis en muslos y abdomen. Estos cuidados permiten que su cuerpo se sienta y luzca mejor, haciendo que cada escueto bikini le ajuste a la perfección.

Con esfuerzo, disciplina y un equipo de profesionales a su lado, la hija de Isabel Preysler ha logrado esculpir un cuerpo que es un reflejo de su trabajo y amor propio.