Viaje ecuestre

El exigente y lujoso viaje de Elsa Pataky y su hija, India, a África

Ocho días de safari a caballo por el desierto de Namibia: aventura, naturaleza y 7.000 euros por persona

Elsa Pataky en una imagen de archivo
Elsa Pataky en una imagen de archivoGtres

"Elsa es oficialmente una trotamundos". Así la define la primera publicación que aparece en su perfil de Instagram, compartida por una compañía de viajes ecuestres. Y lo cierto es que pocas frases capturan mejor el espíritu de la actriz, que tras una breve parada en Madrid, donde cumplió compromisos profesionales, puso rumbo a uno de los rincones más remotos y fascinantes del planeta: Namibia. Allí, junto a su hija mayor, India, de 13 años, emprendió una travesía de ocho días a caballo atravesando el desierto del Namib, considerado el más antiguo del mundo.

La aventura no fue improvisada. Pataky, discreta como acostumbra en su vida personal, decidió compartir los detalles solo una vez finalizada la experiencia. Lo hizo con entusiasmo en sus redes sociales: "Acabamos de regresar de un safari a caballo de ocho días con India, donde cruzamos el desierto de Namib. Los días estuvieron llenos de galopes interminables, caminatas por cañones y noches bajo las estrellas".

Rutas únicas

Detrás de esta experiencia se encuentra una empresa internacional especializada en viajes ecuestres de lujo, Globel Trotting, que organiza rutas únicas en los cinco continentes. Namibia es una de sus joyas: un recorrido de 11 días y 10 noches, con ocho jornadas dedicadas íntegramente a la cabalgata. El trayecto, de unos 320 kilómetros, culmina en la Costa de los Esqueletos, un paraje inhóspito y salvaje.

El precio mínimo para sumarse a esta aventura es de 7.000 euros por persona, aunque la cifra puede aumentar en función del itinerario elegido. En ese coste se incluyen traslados terrestres, cabalgatas, comidas, bebidas en campamento y alojamiento. Lo que no cubre son vuelos internacionales, seguros ni gastos adicionales en lodges o restaurantes, lo que convierte la experiencia en un lujo reservado para quienes pueden y saben disfrutarla.

La ruta es tan exigente como exclusiva. "Apta solo para jinetes avanzados", advierte la compañía en su web. No es necesario ser un experto en doma clásica ni salto, pero sí sentirse completamente cómodo galopando durante horas. También se requiere excelente condición física y una preparación previa, algo que Elsa y su hija, amazonas experimentadas, cumplieron sin dificultad. No en vano, Pataky ha confesado en más de una ocasión que la pasión por los caballos es un vínculo esencial con India: "Cogemos los remolques, metemos a los caballos y nos vamos de viaje juntas a todas las competiciones".

El campamento, lejos de la opulencia de un resort africano, apuesta por un lujo diferente: el del contacto directo con la naturaleza. Los viajeros duermen en camillas y sacos de lona bajo un cielo estrellado, con duchas de agua caliente improvisadas desde un camión y baños portátiles. Las comidas, preparadas sobre la hoguera, se convierten en parte del ritual compartido al final de cada jornada. La compañía, además, promete "una sorpresa" en cada travesía, manteniendo vivo el espíritu de lo inesperado.

La elección de Elsa Pataky no sorprende. Defensora de un estilo de vida activo y en armonía con la naturaleza, la actriz encuentra en estas escapadas la fusión perfecta entre aventura, deporte y familia. Un viaje exigente, sí, pero también una muestra más de que para ella el lujo no se mide solo en cifras, sino en experiencias inolvidables.