Kiko Rivera, desesperado por una deuda de dos millones que Isabel Pantoja dificulta

Mucho se ha hablado de los problemas que han distanciado a Isabel Pantoja de sus dos hijos. Isa Pantoja continúa con su vida, recién casada con Asraf Beno y ajena a las dificultades económicas que atraviesan sus seres queridos. Y es que sus ofensas han sido demasiado grandes como para sentir preocupación por su destino. Si hace unos días se comentaba ampliamente la deuda de la tonadillera por culpa de la mala gestión de Cantora, ahora se desvela que prácticamente la mitad de lo adeudado es responsabilidad directa de Kiko Rivera. De ahí el drástico movimiento que hizo el Dj hace tan solo unos días atrás, para protegerse legalmente de posibles acciones y, con ello, evitar que sus hijos se vean perjudicados.

Cantora está en numerosos rojos, a pesar de tratarse de la joya inmobiliaria más boyante de Isabel Pantoja y Kiko Rivera, pues ambos son propietarios de la finca situada en Medina Sidonia, Cádiz. Ella posee el 52,40%, mientras que él tiene a su nombre el 47,60% restante. Su mantenimiento no hace más que acrecentar los gastos, hasta el punto de suponer un pozo sin fondo en cuanto a las pérdidas provocadas. La deuda que pesa actualmente sobre el refugio de la cantante cuando quiere huir de la atención mediática se ha fijado en 4.214.080,14 euros, como así se puede comprobar en el Registro de la Propiedad. No obstante, no todo este montante deberá pagarlo ella, pues de esta cantidad 2,7 millones pesan sobre su vástago, tras la rehipoteca que realizaron sobre Cantora en 2002.

Pero sobre los hombros de Kiko Rivera no solo está esta deuda de 2,7 millones reclamando su atención. También posee otra con la Agencia Tributaria de 1,1 millones, lo que eleva la cuantía a pagar a los 3,8 millones de euros. De estos, se tendrá que hacer cargo de al menos 2 millones de euros, dada su porción de la finca Cantora, dejando que sea su madre quien se encargue del resto del montante. Algo que se podría solucionar fácilmente con su venta, pues tiene un precio de mercado de 4.348.000 euros, pero se ha topado con la negativa de su madre a deshacerse de sus recuerdos y del lugar en el que se siente segura.

Quizá estas dificultades han sido las responsables de los últimos movimientos en el clan Pantoja. Nada más conocerse que Isabel Pantoja ha comunicado a su entorno directo sus últimas voluntades y el cambio en su testamento para legar a sus hijos lo mínimo que la ley establece, la legítima, Kiko Rivera ha entrado en acción. El joven quiere protegerse ante futuribles complicaciones económicas, por lo que se ha asesorado para iniciar los trámites para renunciar a cualquier tipo de herencia de su madre: “Kiko está encargándose para saber cómo poder renunciar a la herencia. No querría ni la legítima para él, ni que sus hijos hereden las deudas de la abuela”, aseguraba Marisa Martín Blázquez desde ‘TardeAR’.