Lara Dibildos se sincera sobre los últimos meses de vida de su madre

Lara Dibildos concedía este fin de semana una de sus entrevistas más sinceras y emotivas en “Viernes Deluxe”. Su madre, Laura Valenzuela, fallecía el pasado 17 de marzo en Madrid a la edad de 92 años. Y lo hacía, según ella, luchando hasta el final. “Qué peleona… Ella nos conocía a sus nietos, a mí y a la gente que estábamos con ella. Pero llega un momento que ya es la hora de descansar”, comenzaba relatando.

El vínculo entre madre e hija siempre ha sido muy fuerte. De hecho, Lara no dudaba en confirmar que había sido su gran compañera de vida. “Cuando estuve enferma de cáncer, mi padre no pudo venir y la pobre se lo comió solita. Años después, ella tuvo cáncer de mama y acabamos en el mismo hospital solas”, recordó. “Las dos hemos vivido cosas paralelas. Soy hija única y, aunque he sido rebelde e independiente, éramos inseparables”.

Tanto es así que Lara y su madre vivían juntas desde el final de la pandemia: “Su alegría eran sus nietos así que mis hijos y yo nos fuimos a vivir a su casa de toda la vida para estar todos juntos”. Los últimos años de vida, confesó, Laura Valenzuela los pasó descansando mucho, leyendo y rodeada de todos sus seres queridos. Además, Lara se sinceró sobre la despedida que tuvo con su madre. “Yo no callé, debió pensar que era una pesada. Todo lo que le dije fueron cosas bonitas”, reveló.

Emocionada y orgullosa al ver las muestras de cariño de los compañeros de profesión hacia su madre, Lara también desveló con cariño algunos detalles de la vida de Laura Valenzuela, como la pedida de mano de un matrimonio que parecía no llegar por parte de José Luis Dibildos: “Estuvieron 13 años de novios y después se casaron. Me contaban que mi padre no se quería casar de ninguna de las maneras, y un día Mingote, al ver que a mi padre le gustaba un cuadro suyo, le dijo: “si te casas con Laura te lo regalo”. Entonces ya mi padre le pidió matrimonio”.